Para 894 jóvenes de ocho países sudamericanos, las metas para 2023 ya están definidas. Ellos se están preparando desde ya para servir como misioneros en diferentes ciudades del continente. Se trata del proyecto OYiM (sigla del título en inglés One Year in Mission, que se traduce como Un Año en Misión), promovido por el Ministerio Joven Adventista.

Dieciocho de esos jóvenes forman un equipo que actuará en la ciudad de Arequipa, en Perú. El grupo será subsidiado por la sede sudamericana adventista, y empeñará sus dones y conocimientos en actividades comunitarias y de evangelismo en la región. Estas informaciones fueron divulgadas este martes 8, durante el Concilio Anual de líderes de la Iglesia Adventista en Sudamérica.

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OYiM nació en 2013, con un equipo de 14 jóvenes procedentes de todas las regiones del mundo. Ellos aceptaron la propuesta del Ministerio Joven de, apoyados y subsidiados por la Iglesia Adventista, dedicar un año de sus vidas al servicio voluntario. Así, se establecieron en Nueva York, Estados Unidos, para atender las necesidades específicas de la comunidad y promover acciones de evangelismo, cada cual empleando sus propias habilidades y formación académica.

Al año siguiente, el proyecto fue repetido aquí en Sudamérica, con 123 voluntarios divididos en once equipos. Uno de ellos, apoyado por la sede administrativa sudamericana adventista, actuó en la ciudad de Montevideo, Uruguay. Desde entonces, con nuevos grupos entrando en acción cada año, 5.445 misioneros ya participaron del proyecto en el territorio.

Vea abajo el video promocional de OYiM para 2023: 

Según el director de los jóvenes adventistas para ocho países sudamericanos, el pastor Carlos Campitelli, el proyecto OYiM marca la vida de los voluntarios para siempre. “Al dedicar un año de sus vidas a una iniciativa misionera como esta, ellos desarrollan amor por la misión, por la Iglesia y por sus semejantes, y deciden ser misioneros para toda la vida. Esos jóvenes crecen, así como los lugares e iglesias que los reciben, y otros obtienen motivación para vivir esa experiencia, desarrollando una visión misionera formadora y transformadora”, afirma.

Misión Caleb

Otro proyecto de voluntariado del Ministerio Joven adventista es Misión Caleb, que existe desde 2008. Con acciones semejantes a las de OYiM, los jóvenes dedican su período de vacaciones, en enero y julio, al servicio y al evangelismo.

La iniciativa ganó popularidad entre los jóvenes y viene creciendo a lo largo de los años. La primera edición del proyecto contó con 26.493 voluntarios, número que llegó a 241.548 en 2022 (un aumento del 811%). Para la edición del próximo año, se esperan 314.800 participantes, con una meta de 70 mil bautismos.

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