Incluso ante un periodo de grandes desafíos, estamos iniciando un nuevo ciclo de metas y objetivos. Sin embargo, una pregunta que siempre surge es: ¿cómo voy a cuidar de mi salud este año? ¿Qué debo hacer para alcanzar mis sueños? Y, sin duda, en las metas que trazamos a principio de año, siempre están las cuestiones relacionadas a la alimentación saludable y al ejercicio físico.

No es raro llegar a fin de año con la meta del 1° de enero todavía incompleta. Muchos terminan dándose cuenta de que no logran transformar sus planes en realidad. La verdad es que pocas personas logran, de hecho, poner en práctica sus objetivos como les gustaría. La cuestión que queda es: este año, ¿cómo puedo poner en práctica una vida saludable?

Lea también:

• Mi comida ¿puede influenciar mi estado de ánimo?
• Mejore su salud emocional

Vamos a conversar de una forma muy directa y práctica para ayudarle a ver las cosas con claridad y objetividad. Si usted no sabe cómo comenzar o recomenzar a tener hábitos que sean buenos para su salud, o elaborar sus metas, estos consejos pueden ser un muy buen inicio. Vea cinco consejos que lo ayudarán a que su vida sea más saludable:

1. Tenga metas que puedan ser logradas.

Tener una planificación que pueda cumplir es fundamental. Nunca olvide que el cambio de hábitos evoluciona con el tiempo. Nadie se despierta siendo fitness sin nunca haber ido al gimnasio o se convierte en atleta “de la nada”. Se necesitan constancia y entrenamiento. Adaptar las metas a la realidad hace que usted pueda cumplir lo acordado y, principalmente, que respete su propio tiempo. Y en caso de que sea necesario adaptar el plan inicial, realizar ajustes a sus metas, ¡hágalo! Pero no abandone sus planes.

2. Mire siempre el “vaso medio lleno”.

Enfóquese más en los alimentos nutritivos que puede incluir en su dieta que en alimentos para excluir de ella. Una educación alimentaria siempre va a ser más eficaz aumentando la variedad. Experimente nuevos sabores y amplíe las posibilidades. Es mejor que intentar comer lo que no le gusta a toda costa. Permítase gustar de nuevos alimentos, especialmente en la categoría de las frutas, vegetales y hortalizas.

3. Olvide los errores del pasado.

Los excesos cometidos anteriormente o en los fines de semana ya quedaron atrás. Aproveche para enfrentar un nuevo momento. Y tenga paciencia. La recuperación o la transformación de nuestro cuerpo también necesita de un espacio de tiempo para ocurrir.

4. Dé más valor al cambio de hábitos que a los números de la balanza.

Enfóquese en el cambio y persista. Los resultados estéticos, si usted los quiere, vendrán con el tiempo.

5. Una meta nunca debe comenzar con un no.

Cuando usted crea restricciones, su mente automáticamente va a intentar sabotear y aumentar aún más el deseo por aquello que usted restringió. Ese error es muy común. Muchas personas crean metas como: no consumir azúcar por 30 días o no comer comida rápida durante dos semanas. Incluso puede lograr el objetivo por un tiempo, pero, la mayoría de las veces, estos fallan a largo plazo.

Atento a las metas

Muchas veces, el cambio de hábitos no ocurre simplemente porque no hay una voluntad real de cambiar. Consecuentemente, el primer paso para la transformación ya queda comprometido y la planificación es postergada. Pero si usted quiere cambiar de verdad, ¡comience ahora! Y no tenga miedo o vergüenza de las pequeñas actitudes. Use los consejos, son fundamentales.

Y no olvide que para tener una vida saludable es necesario hacer ejercicio físico y estar en contacto con su médico para detectar cualquier alteración o necesidad. ¿Quiere dos consejos más? ¿Quiere cambiar y no sabe qué metas establecer? Los ocho remedios naturales son su mayor parámetro. No lo olvide: los pequeños pasos van a motivarlo a estar cada vez más cerca de su objetivo final.