Brasilia, Brasil… [ASN] Es en el pueblito de Shungnak, un área remota del nordeste de Alaska, en Estados Unidos, donde Anthony Sherman vive con su familia. Ellos aceptaron el desafío de servir como misioneros en la localidad que tiene solamente 256 habitantes, que no tiene calles que la unan a otros pueblos y que tiene un clima glaciar, con temperaturas negativas durante buena parte del año.

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La rutina del matrimonio forma parte del primer episodio de la serie Reavivados para la Misión (Revival for Mission, en inglés), producido por la sede mundial adventista y presentada por el pastor Ted Wilson, presidente de la denominación a nivel global, que en los últimos años ha reforzado la necesidad de la participación de cada miembro para anunciar el regreso de Cristo.

“Es maravilloso ver en lugares lejanos, en lugares a los que a veces no les damos valor, la manera en la que el Espíritu Santo está actuando en la vida de las personas. El objetivo es mostrar estas experiencias para que sean una inspiración para la familia [adventista]”, destaca el pastor Williams Costa Jr., director mundial de Comunicación de la Iglesia Adventista es uno de los idealizadores del proyecto.

A lo largo de los capítulos, el pastor Wilson visita varios lugares para contar historias y traer lecciones que inspiren e incentiven a los miembros a ser parte integrante de este proceso. Además, la propuesta es también es mostrar que Dios puede actuar a través de su pueblo si este se mantiene unido y dispuesto a aceptar su llamado.

Realidades opuestas

Fue exactamente eso lo que hizo que la familia Sherman aceptara trabajar en una región con desafíos, como la falta de logística y la distancia de parientes y amigos. “Ha sido una experiencia súper positiva para nosotros porque estamos haciendo la voluntad de Dios. Y no hay nada mejor que eso: hacer su voluntad”, asegura el misionero, con una sonrisa estampada en el rostro.

Por otro lado, el primer video de la serie muestra la realidad de lo que sucede en la ciudad de Nueva York, centro financiero, cultural y turístico de Estados Unidos. Allí, el proyecto NY13 concentró un esfuerzo masivo en el evangelismo urbano de la región. Por medio de una escuela pionera, los adventistas desarrollaron formas creativas de llegar a la comunidad, como dar clases de inglés y conferencias de salud, lo que resultó en más de cinco mil bautismos.

“Nos sentimos solos, aunque estemos en medio de la multitud. Ese vacío solo puede llenarlo Cristo. En ese sentido, Nueva York es exactamente igual a Shungnak: parece vibrante, pero [concentra] personas que necesitan un Salvador”, constata el pastor Wilson, que en las narraciones reflexiona sobre el papel de la iglesia y de cada miembro en la expansión de este trabajo.

“La misión es adónde Dios nos llama. Y a veces, Dios lo llama para cumplir la misión del otro lado de la calle o en otro continente. Entonces, de una manera o de otra, el presidente de la iglesia muestra lo que está sucediendo en diferentes partes del mundo, y esperamos que sea un gran motivación e inspiración para las personas”, señala Costa Jr. Para visitar la página oficial del proyecto en espanõl, haga clic aquí. [Equipo ASN, Jefferson Paradello]