Lima, Perú... [ASN] “¡Gracias Dios! ¡Gracias porque tus promesas nunca fallan!”, expresó Nancy Chacón al recibir la llamada en un nuevo trabajo, luego de ser despedida de una empresa que no aceptaba sus principios cristianos.

Nancy es miembro de la Iglesia adventista “Brasil” en Lima. Había trabajado por ocho años en una empresa transnacional y en los últimos tres años, la indiferencia de sus líderes hacia ella fue muy notoria. La invitación en la participación en las reuniones con los ejecutivos iba disminuyendo de a pocos porque Nancy no tenía el mismo estilo de vida de ellos. Al poco tiempo, fue presionada por sus superiores a cometer actos en contra de sus principios ético – morales y profesionales, a lo que Nancy siempre mantuvo su lealtad. “Decidí estar firme en lo que yo creía aunque sabía que mi trabajo estaba en riesgo. Solo debía confiar en Dios”, expresó.

Se propuso a incrementar sus ofrendas, del 5% al 10% y mantener la entrega de sus diezmos de todo lo que obtenía fielmente. Así lo hizo con gratitud a Dios y porque le permitía confiar en él a pesar de lo que le estaba pasando.

“Mis jefes emitieron una carta de despido. Llegó el viernes del último día de trabajo en la empresa. Tenía sentimientos de preocupación porque tenía que seguir manteniendo a mi familia pero mi confianza en Dios era mucho más”, sostuvo Nancy.  Para su sorpresa, ese mismo día en la tarde, recibió la llamada de una empresa farmacéutica afirmando que había aprobado la entrevista de trabajo y que Nancy tendría que iniciar sus labores la siguiente semana.

“Fue un viernes de mucha gratitud a mi Dios, mi esposo y yo recibimos el sábado con lágrimas por la  felicidad que nos embargaba. El Señor tuvo a bien proveerme un trabajo”, puntualizó.

Ahora Nancy Chacón vive para contar lo que Dios hace cuando sus hijos son fieles. “Sé fiel al Señor y él te concederá las peticiones de tu corazón”, es la frase que la motiva a amar más a Dios. [Equipo ASN, Ludwing Esqueche]