A finales del 2021 específicamente en el mes de febrero a nivel nacional los medios de comunicación informaban a la comunidad que un incontrolable incendio estaba consumiendo varias casas en Castro, Chiloé; un episodio lamentable donde cientos de familias resultaron damnificadas.

Una mano a la comunidad

Sin embargo el tiempo ha pasado y la Iglesia Adventista del Séptimo Día ha gestionado diferentes tipos de ayuda, a fin de brindar una mano a la comunidad; dando así mismo lugar a un operativo social para este año denominado OPSO 2022.

Una mano brindada por jóvenes adventistas unidos de Caleb y ASA, quienes no dudaron en salir en ayuda de 10 familias de Castro; 7 del sector de Pedro Montt y 3 de Villa Chiloé; extendiendo 60 kilos de alimentos, 2 quintales de harina de 20 kilos cada uno, un saco de papas, una cocina a gas, una mochila con útiles para estudiante y un kit espiritual a cada hogar.

Por otro lado se complementó esta ayuda con atención médica y nutricional gratuita a través de telemedicina.

“Queremos agradecer inmensamente a cada uno de los donantes  que hacen posible esta maravillosa obra de amor, porque ayudamos a las familias que perdieron todo por el fuego,  Y de paso aprovechamos en dejar material espiritual que es, Biblia fe de Jesús y el libro misionero”. Afirmó el pastor Fabricio Mayorga.

Un aporte para llegar al corazón

Iniciativas como estas fomentan las buenas relaciones con la comunidad no cristiana con nuestra Iglesia Adventista del Séptimo Día, y es que llevar ayuda a quien lo necesita siempre hará más fácil llegar a los corazones de la gente. La invitación es a involucrarse en este tipo de instancias,  servir al prójimo y al Señor. 

Dios nos permita llegar con el mensaje a cada rincón del sur de Chile, uno que poco a poco busca más del Señor al ver como nuestro mundo decae ante la maldad del hombre, sigamos llevando las buenas nuevas, las noticias de esperanza que señalan que Cristo vuelve pronto.