“Nunca imaginé que algún día podría tener mi casa tan linda, y le doy gracias a Dios que colocó en estos jóvenes el deseo de ayudar a mi familia. No me caben las palabras para agradecer todo esto que hicieron por nosotros. Sus oraciones, canciones, estudiar la biblia, todo ha sido maravilloso”, expresó Tatiana, una madre que vivía en una infraestructura de caña junto con su familia, y que los Calebs, impactaron no solo con ayuda material, sino también con apoyo espiritual para sus miembros.

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Así como ella, más de 5 hogares recibieron la misma ayuda por parte de los jóvenes Calebs pertenecientes a la Misión Ecuatoriana del Sur (MES), quienes desde el día sábado 04 al viernes 10 de marzo, fueron "más allá de las puertas”, y realizaron labores donde destacaron y desarrollaron los dones que Dios les dio ante esta causa.

“Más allá de las puertas”, lema con el que se conoció este proyecto, motivó a la juventud, a realizar diversas acciones como la reconstrucción de fachadas, la reconstrucción de un templo en el cantón Las Lajas, perteneciente a la provincia de El Oro, la limpieza del interior y exterior de 78 iglesias de la zona sur, ayudas comunitarias en 128 sectores, asistencia a personas con discapacidad, visitas misioneras, entrega de víveres, y estudios bíblicos.   

“Misión Caleb, ha cambiado mi vida. Puedo decir que aquí me fortalezco de manera espiritual. Me siento feliz de tener la oportunidad de participar de cada uno de estos proyectos, y saber que Dios me quiere utilizar para poder servir a los demás”, dijo Ana Alarcón, líder de jóvenes para una región.

Para el pastor Edmundo Ortega, líder de jóvenes de la MES, la energía y la fuerza de la juventud son necesarias para el servicio a Dios, la comunidad y también para la ganancia de almas.“Es necesaria la presencia de los jóvenes en los proyectos que promueve la iglesia, y misión Caleb permite a la juventud ponerse al servicio de Dios, servir al prójimo y ser de bendición para su comunidad, además de proveerle la más grande de las oportunidades y esta es, lograr tener un encuentro personal con Dios que transforme sus vidas para siempre”, comenta el líder.

La preparación de cada equipo, no solo se basó en el esfuerzo físico, ya que la necesidad de la intervención Divina en toda la jornada, llevó a estos jóvenes a participar en una ceremonia de Santa Cena previo al inicio de la semana.

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