El edificio de la Corte Suprema en Corea del Sur, lugar de una decisión emitida el 31 de enero de 2019, que brinda protección legal a los que guardan el sábado y a otras personas de fe. (Foto: Wikipedia Commons)

El calvario legal, que duró casi dos años, de Han Ji Man, un joven estudiante de medicina adventista del séptimo día en Corea del Sur finalizó el mes pasado cuando la Corte Suprema del país sostuvo su derecho de rendir exámenes universitarios fuera de las horas del sábado (día de reposo). Los adventistas en Corea celebran el fallo histórico, expedido el 31 de enero de 2019, que esperan sea una señal de una nueva era de protección legal para los guardadores del sábado y otras personas religiosas.

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“El veredicto es históricamente importante para los adventistas coreanos y proporciona un precedente jurídico que puede ser usado para futuros litigios sobre temas relacionados a guardar el sábado”, dijo Sun Hwan Kim, director de Relaciones Públicas y Libertad Religiosa (PARL, por sus siglas en inglés) para la Iglesia Adventista en la región de Asia Pacífico Norte.

Añade que “este fallo milagroso no podría haber ocurrido si un fiel joven adventista, el hermano Han, no se hubiera mantenido firmemente en su fe”.

Los adventistas en Corea se han enfrentado por mucho tiempo a las dificultades de guardar el sábado, con exámenes universitarios y de acreditación profesional frecuentemente programados para ser rendidos en sábado. A través de los años, muchos miembros de iglesia han sacrificado avances educativos o de carrera para permanecer fieles a sus convicciones. Aunque la Constitución Coreana prohíbe la discriminación debido a la religión, las cortes no habían, hasta ahora, extendido esa protección al tema de guardar el sábado.

Batalla por protección legal

La batalla legal de Han Ji Man comenzó cuando era un estudiante de primer año de medicina y descubrió que varios exámenes cruciales caían en sábado. El presentó su demanda contra la facultad de medicina solo después de haber hablado con sus profesores y los administradores de la facultad (y una apelación a la Comisión Nacional de Derechos Humanos de Corea) y que no pudieran resolver su problema.

Luego de perder su caso en los tribunales inferiores, Han Ji Man apeló al Tribunal Superior y ganó. La facultad de medicina apeló ese resultado a la Corte Suprema del país. El mes pasado, la Corte Suprema defirió a la decisión del Tribunal Superior, dando así la victoria a Han Ji Man y sosteniendo una protección constitucional más sólida para la libertad religiosa.

“La victoria en la Corte Suprema no fue obtenida al azar”, expresó Sun Hwan Kim. Él lo atribuye en particular a las incansables oraciones de los miembros de iglesia coreanos, y miembros de iglesia de todo el mundo, que apoyaron a Han Ji Man a través de su batalla legal. También destacó el diligente trabajo del abogado de Han Ji Man, Shin Myung Cheol, así como los esfuerzos para recaudar fondos y el apoyo del departamento de PARL de la Unión Coreana y a la Sociedad para la Libertad Religiosa y Oportunidades Igualitarias, un grupo compuesto mayormente por médicos adventistas.

Con este fallo, los adventistas en Corea esperan que el respeto a la observancia del sábado como día de reposo sea menos desafiante para los miembros de iglesia en muchas áreas de la sociedad coreana. Pero igual de importante, según Sun Hwan Kim, es el poderoso ejemplo que el caso proporciona acerca de la fidelidad a Dios ante la adversidad.

“Oro para que el valiente acto de fe del hermano Han pueda ser el punto de apoyo sobre el cual otros jóvenes adventistas puedan apoyarse y continuar por el camino de la fe”, dijo.