El informe tradicionalmente hecho por el área de Tesorería durante el Concilio Anual, fortaleció algunos conceptos importantes. El primero de ellos en cuanto a la fidelidad de los miembros adventistas en Sudamérica. Uno de los puntos principales enfatizados fue el de una fuerte inversión en actividades directamente relacionadas a la misión de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.

Según el pastor Marlon Lopes, director financiero, cada año las inversiones aumentan. Entre 2006 y 2009, la sede sudamericana adventista invirtió R$ 49,54 millones en la misión. Entre 2010 y 2013, esa inversión fue de R$ 96,30 millones; y entre el 2014 y 2017, la inversión pasó a R$ 171,80 millones.

Factor de generosidad

De acuerdo con el director financiero, otro aspecto abordado en el informe tiene que ver con la fidelidad de los miembros. Para Lopes, el avance de la obra adventista es medido por el tipo de relación que las personas tienen con los diezmos y las ofrendas.

Él habló del índice llamado ‘factor de generosidad’. Los datos históricos demuestran que, en los años 1930 y 1940, en promedio los miembros adventistas sudamericanos entregaban como ofrenda el 5% de sus entradas, lo que equivale a la mitad del valor dado como diezmo (10%). En los años siguientes ese índice disminuyó; sin embargo, en 2008, hubo una reacción positiva. Hoy, en promedio, un miembro adventista acostumbra a ofrendar el equivalente al 4% de sus ingresos.

Otro dato presentado por Lopes confirma que el trabajo de educación y de concientización para la fidelidad en los diezmos y las ofrendas ha surgido efecto. Los análisis comparativos confirman que, en 2014, el 20,6% de los miembros adventistas dieron el diezmo por lo menos una vez al año, en 2015 el porcentaje subió a 36,69% y hoy es de 41,39% del total de miembros (datos contabilizados hasta el mes de septiembre). “Notamos que hay un proyecto definido para que las personas sean fieles. Cada año aumenta el número de personas que dan el diezmo”.

Nueva generación fiel

El segundo punto resaltado por el tesorero fue sobre la fidelidad de los más jóvenes. Se constató que los más jóvenes (miembros adventistas dentro de lo que se conoce como nuevas generaciones) comienzan a entender mejor acerca de la importancia de ser fieles a Dios en las finanzas.

Una evaluación de los donantes de diezmos y ofrendas, con menos de 20 años, evidencia esa nueva realidad. Entre el 2015 y 2018, el aumento de adolescentes, entre 10 y 14 años de edad, llegó al 103,6%. Un aumento asombroso no identificado en franjas etarias superiores. Entre 15 y 19 años, el crecimiento en la fidelidad en los diezmos fue registrado en un 35,05% en los últimos 3 años. Marlon Lopes resaltó que fue importante el trabajo de base hecho por medio de los clubes de conquistadores para que este índice fuese alcanzado.