Investigación relaciona el alcohol a siete tipos de cáncer
El uso aunque moderado de alcohol puede ser un camino para el temido cáncer en varias partes del organismo.
Brasilia, DF… [ASN] Una investigación científica confirma los riesgos del alcohol para la vida humana. El estudio señala que el consumo de alcohol está relacionado a un aumento en el riesgo de que una persona desarrolle siete tipos diferentes de cáncer. Según el estudio, aun los individuos que beben una cantidad baja o moderada de la sustancia están con ese riesgo.
El trabajo fue realizado por académicos de la Universidad de Otago, Nueva Zelandia y publicado en el periódico científico Addiction. De acuerdo con el artículo redactado a partir de la investigación, el consumo de alcohol fue el responsable de cerca de 500 mil muertes por cáncer en 2012, lo que corresponde a cerca de 5,8% de esas muertes en el mundo.
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La ingestión de bebidas alcohólicas está relacionada especialmente al cáncer de boca, garganta, laringe, esófago, hígado, colon, intestino y mama, dicen los científicos. La enfermedad aparece con más frecuencia en personas que deben mucho, obviamente. Sin embargo, el riesgo también existe para los que consumen cerveza, whisky y otros productos del género en media y baja cantidad.
Vea el gráfico que muestra los efectos del alcohol en el organismo.
EFECTOS DEL ALCOHOL
CEREBRO: Libera dopamina en el sistema límbico y promueve la desinhibición comportamental, psicológica y social. Con el aumento de la dosis y por la apertura de los canales de cloro de las neuronas, libera otra hormona que deprime el funcionamiento del sistema nervioso central; el efecto depresor del etanol llega a promover una anestesia y hasta el coma; puede llevar a la muerte por depresión respiratoria o paro cardíaco.
OJOS: Visión turbia y doble.
Corazón: Taquicardia, hipertensión arterial, accidente vascular hemorrágico, miocarditis.
PULMONES: Aceleración del ritmo respiratorio y depresión, aumento de las infecciones.
HÍGADO: Aumento agudo del trabajo enzimático, el uso crónico causa fibrosis, esteatosis, cirrosis y cáncer.
ESTÓMAGO: Aumenta la producción de gastrina, desarrolla gastritis y puede llegar a una úlcera y hasta cáncer en la región gastrointestinal.
SANGRE: Con el uso crónico, altera la formación de las células sanguíneas y produce anemia.
SEXO: Acostumbra desinhibir el comportamiento sexual en dosis bajas, lo que puede llevar a sexo sin protección y contaminación por diversas enfermedades o el uso crónico puede llevar a la impotencia.
PÁNCREAS: Inflamación aguda y crónica.
MÚSCULOS: Debilidad, inflamación crónica (polineuritis crónica), atrofia e incapacidad para caminar.
EFECTOS DEL CRACK
CEREBRO: Libera dopamina, lo que desinhibe, pero también acelera el funcionamiento en general, inhibe el apetito y el sueño, aumenta la velocidad del habla y puede producir un torrente de ideas.
A medida que se aumenta la dosis, produce ansiedad extrema, paranoia con delirios y alucinaciones, psicosis, así como episodios de pánico.
OJOS: Dilata las pupilas.
CORAZÓN: Acelera los latidos cardíacos, pudiendo producir arritmias, aumenta la presión arterial, produce accidentes vasculares isquémicos (infarto).
PULMONES: Aumenta la frecuencia respiratoria, produce broncoespasmos.
HÍGADO: Acelera el metabolismo.
ESTÓMAGO: Gastritis, hemorragias e isquemias.
SANGRE: Altera la formación de hematíes y produce sangramientos.
SEXO: Aumento del apetito sexual a corto plazo e impotencia a largo plazo.
PÁNCREAS: Hemorragias.
MÚSCULOS: Temblores e hipersensibilidad cutánea.
Mito del uso moderado
En un artículo publicado en el Portal Adventista, el médico Hildemar dos Santos afirma que “con todas esas evidencias todavía existen muchos médicos que aconsejan el uso moderado de alcohol para proteger el corazón de los ataques cardíacos. Mi opinión es que tenemos suficiente conocimiento de factores que pueden prevenir el ataque del corazón, y por lo tanto no necesitamos usar el alcohol. El gran problema es definir lo que sería moderado. Una gran mayoría de las personas que resultan afectadas por el alcohol usan el alcohol un poco más que lo moderado o incluso no usan alcohol a diario, pero cuando lo usan fácilmente lo hacen en exceso”.
Este año, los adventistas del séptimo día en América del Sur eligieron como uno de los temas de su campaña Rompiendo el Silencio la asociación entre el alcohol y la violencia doméstica. “Los dos asuntos están interrelacionados, por eso resolvimos hablar no solo de las frogas ilícitas, sino de las legalizadas como las bebidas alcohólicas que destruyen muchas familias de manera constante”, comenta la coordinadora del proyecto, Marli Pyerl. Se publicó una revista que está siendo distribuida y trata del tema desde diversos ángulos con artículos y reportajes. [Equipo ASN, Felipe Lemos, con informaciones del periódico O Globo]
Posición adventista sobre el uso del alcohol: