Joven vuelve a la iglesia e intensifica evangelismo por WhatsApp
Actualmente, la aplicación de WhastApp es el medio que usa Fran para llevar a otros amigos a conocer de la Biblia.
Brasilia, Brasil...[ASN] La vida de Francinilda Rodrigues de Aquino, de 36 años, o Fran, como más se la conoce, tuvo por lo menos dos giros con relación a su experiencia espiritual. Criada por su abuela, ella conoció el mensaje adventista hace algunos años por medio de predicaciones de la evangelista Nilda Aquino. En 1997, recuerda que en la ciudad donde vivía, Martins, Rio Grande do Norte, Brasil, cierta vez fue a buscar un remedio y terminó escuchando a Nilda que hablaba de la Biblia. El prejuicio contra la predicadora adventista era grande en esa ciudad predominantemente católica. “Yo faltaba a clases para oír a Nilda y comencé a estudiar la Biblia. Fui bautizada a escondidas de mi abuela, recuerda”. Ese fue el primer giro.
El segundo giro tuvo un marco importante este lunes, durante el Concilio Anual de la Iglesia Adventista del Séptimo Día para ocho países sudamericanos. Fran fue rebautizada junto con sus hijas Ellen y Roberta en una ceremonia caracterizada por el énfasis en el uso de los medios de comunicación para la evangelización. Es que, en 2015, cuando se mudó a la ciudad catarinense de Joinville, explica, su fe se enfrió, pasó por problemas personales y terminó apartándose de la Iglesia Adventista.
Pero, aunque no iba a una congregación adventista, aprovechó la oportunidad para leer porciones de la Biblia a una persona que conoció en un grupo de reeducación alimentaria. Conoció a esa persona en un grupo de WhatsApp. El objetivo, entonces, pasó a ser el de dar estudios bíblicos a la nueva amiga, que vive en la ciudad de São Bento do Sul. Eso hizo que volviera a asistir, inclusive, a los cultos adventistas. “Fue un tipo de reavivamiento que tuve en ese momento cuando comencé a darle estudios bíblicos. Dios hizo la obra para que yo volviera a sus caminos. A partir de ahí pasé a revivir todo lo que había pasado con Cristo antes”, afirma. Fran todavía da estudios a su amiga. Le envía audios, y después hace una llamada para aclarar dudas en tiempo real por medio de la aplicación. En agosto de este año, inclusive, conoció personalmente a esa amiga. Antes era solo un diálogo virtual.
Y otros estudios bíblicos virtuales están en vista de parte de la joven misionera. Uno de ellos es con la propia administradora del grupo de reeducación alimentaria quién por ahora, alegó falta de tiempo para compartir asuntos bíblicos con Fran. “No solo quiero ser parte de la Iglesia Adventista, sino que quiero trabajar por Jesús ahora. Todo sucedió en mi vida de una forma tan buena, pero Dios trabaja en nuestra vida de una manera que no entendemos”, comenta. [Equipo ASN, Felipe Lemos]