Linda Koh, Directora mundial del Ministerio del Niño de la Iglesia Adventista, estuvo presente en nuestro país. Junto a Graciela de Hein, Directora del Ministerio del Niño y Adolescente para ocho países en Sudamérica y Evelin de Bentacor, líder del Ministerio del Niño y Adolescente de Argentina recorrieron diversos lugares y brindaron talleres y capacitaciones.

La líder mundial es doctora en psícología y tiene más de 20 años de experiencia en el área de la educación. Tiene dos hijos y está casada con Oliver Koh, quien trabajó como director del área educativa en el continente asiático y que también la acompañó en su gira por nuestro país.

En una gira que involucró la provincia de Buenos Aires, Entre Ríos, Misiones, Corrientes y Chaco, la líder mundial de este ministerio compartió en diversos encuentros con niños, adolescentes, padres, maestros y jóvenes conquistadores, temáticas referidas a cómo ser mentores, la importancia de los varones para sumarse a dicho ministerio como líderes e incentivar el cuidado de las nuevas generaciones.

Evelin Bentancor reflexiona: “La gira fue muy positiva. Nos estimula a seguir adelante en la misión que tenemos en este ministerio. Sin embargo, queremos seguir incentivando y motivando a los chicos a que continúen creciendo en su relación con Dios”.

El Ministerio del niño y del adolescente se creó para facilitar la profundización de la experiencia espiritual de ellos; con el fin de atraerlos a una amistad redentora con Cristo y a un compromiso con la Iglesia Adventista del Séptimo Día que dure toda la vida.

Según la autora Ellen G. White en su libro El Deseado de todas las gentes, menciona que los corazones de los niños son más susceptibles a las enseñanzas del Evangelio, “sus corazones están abiertos a las influencias divinas, y son fuertes para retener las lecciones recibidas”. Por lo tanto “necesitan ser educados en las cosas espirituales, y los padres deben darles todas las ventajas a fin de que adquieran un carácter semejante al de Cristo“ cierra la escritora.

Estos ministerios tienen la misión de crear en la mente de ellos el amor y la bondad de Cristo, ayudándoles a tener una base importante en las enseñanzas de la Biblia, el desarrollo de la fe y el carácter armónico en semejanza a Jesús.

Tanto niños como adolescentes necesitan y gustan de estar en grupo de amigos y tener encuentros sociales, por eso la iglesia ofrece actividades recreativas y sociales, en un ambiente cristiano y saludable; donde puedan desarrollarse actividades equilibradas y compartirse buenas amistades.

(Por Alexis Villar)