Jóvenes estimulan el cuidado del medio ambiente
En el primer día de acciones, voluntarios distribuyeron bolsas de residuos y ejemplares del libro Esperanza Viva.
Río de Janeiro, RJ… [ASN] Mientras las atletas que disputaban la maratón femenina de esta edición de los Juego Olímpicos pasaban por el Aterro do Flamengo, en Rio de Janeiro, el vendedor ambulante Francisco Damián transitaba por el césped con el carrito que usa para vender agua, gaseosas y otras bebidas a los turistas y habitantes de la zona.
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Con más de una década en la misma actividad, el paulistano que vive en la ciudad hace 30 años sabe de las dificultades que enfrenta cuando el asunto es el cuidado del medio ambiente. Por más que existan acciones e iniciativas variadas que buscan crear una concientización en las personas con relación a este aspecto, no siempre el discurso teórico se lleva a la práctica.
“Tener basura en las calles es algo fuera de los límites. No se puede tolerar, pero es algo que sucede hasta en los grandes eventos como este”, resalta Damián mientras mira hacia la pista durante el paso de una de las corredoras. El comerciante defiende que la mayoría de las personas no tiene una conciencia ecológica, y luego señala a un vaso de plástico tirado al lado de un turista.
Demostrar la misma preocupación fue lo que hicieron los jóvenes del proyecto Circuito de Campeones, quienes el domingo 14 de mañana distribuyeron 20 mil bolsitas de residuos para los autos durante la prueba que se realizaba en el lugar.
Damián, al recibir la suya, no solo elogió la iniciativa por la preocupación con la conservación del medio ambiente, sino también por buscar implantar en la mente de una generación la importancia de cuidar del futuro del planeta. “Ese es un trabajo excelente, y es difícil ver a personas de esa edad preocuparse por ese asunto al punto de entregar algo que incentive a otros a hacer los mismo”, evalúa.
El trabajo realizado por los voluntarios fue transmitido al vivo por la página oficial de la Iglesia Adventista en Facebook en portugués y español. Este recurso, utilizado cada vez más por la institución, busca dar al internauta una dimensión del alcance de las acciones desarrolladas a lo largo del año.
Además de las bolsas, entregaron 20 mil ejemplares del libro Esperanza Viva en portugués, inglés y español, una forma de dejar un obsequio destinado a responder algunas de las principales interpretaciones bíblicas equivocadas en un lenguaje accesible y contextualizado.
Damián, quien manifestó tímidamente que todavía no había leído la obra que recibió minutos antes, defiende que la palabra esperanza por sí sola ya transmite un sentido positivo a la vida diaria de cada persona. “Yo creo que, aunque todavía no conozco lo que está escrito, es un mensaje que se necesita en los días de hoy”, dice sonriendo.
Para causar ese tipo de impresión en la mente de las personas la estudiante Daniele Prando decidió faltar a sus clases del curso de Fisioterapia durante una semana para dedicarse a realizar actividades evangelizadoras y sociales en Rio de Janeiro. Ella vive en la ciudad de Colatina, Espíritu Santo, y vio en el proyecto una oportunidad para fortalecer su fe.
“Quiero salvar a otras personas. Y esa actividad de hoy es un paso para hacerlo. Mucha gente podrá leer el libro, aunque sea por curiosidad”, cree Daniele, que también está aprovechando su primera experiencia de esa naturaleza para fortalecer lo que ella considera uno de sus principales dones: hablar. Es el medio que usa para acercarse a otros y compartir lo que cree. [Equipo ASN, Jefferson Paradello]