La Asociación Sur Austral de Chile se une con entusiasmo a la campaña nacional de Evangelismo de Invierno "El Último Llamado", organizada por la Unión Chilena junto a Nuevo Tiempo.

Alabando en el sur

A través de diferentes formas de participación, como grupos pequeños, centros de predicación y transmisiones en vivo, la ASACh a lo largo de los más de 3 mil kilómetros de su extensión ha unido a la iglesia en esta iniciativa evangelística.

Desde Angol hasta el extremo sur del campo, se han involucrados hermanos y hermanas en estas jornadas de evangelismo de invierno, buscando compartir esperanza con quienes no conocen a Dios.

Siendo esta una oportunidad clave para el evangelismo austral, el cual se ha dividido como plan evangelistico en cuatro ciclos; avanzando primeramente completando el ciclo de Semana Santa. Ahora, llegando a la mitad del año y finalizando el segundo ciclo, el territorio austral se halla a mitad del proceso de este 2024.

Apreciaciones

“A pesar de que ha sido un mes difícil debido a las lluvias, especialmente en el sur de Chile donde son frecuentes los temporales, los hermanos se han ido acercando a las iglesias con mucho ánimo y entusiasmo, llevando visitas para conocer a Cristo”. Añade con optimismo el evangelista del sur de Chile, pastor José Ramírez.

El evangelista del sur de Chile por otro lado confía en que este fin de semana se podrán integrar cerca de 150 nuevos miembros a la iglesia, y además expresa sus agradecimientos hacia la Iglesia a nivel nacional y la campaña "El Último Llamado", liderada por el pastor Alberto Silva, evangelista de la Unión Chilena desde la ciudad de Talca, quien además comparte un mensaje importante.

“Estamos viviendo la última etapa de la historia humana, tenemos el grande desafío de predicar el mensaje de los 3 ángeles (…)  Después de esta invitación que como adventistas hacemos al mundo no existirá otra invitación de parte de Dios a los habitantes de esta tierra”. Concluye el evangelista.

La ASACh sigue firme en el compromiso de llevar el mensaje de esperanza y salvación a aquellos que aún no conocen a Cristo. En este invierno, evangelismo buscará tocar los corazones y llevar el último llamado de Dios a todos aquellos que necesitan escucharlo.

Que el Señor siga guiando y bendiciendo esta noble labor y traiga nuevos corazones para ser alcanzados con las promesas que el Padre tiene para sus hijos.