Guayaquil, Ecuador... [ASN] El trabajo de los jóvenes Calebs, complementa un trabajo que hace varios meses, viene realizando la hermandad del distrito Suroeste de Guayaquil.

El Pr. Carlos Campitelli, Director de Jóvenes de la Iglesia Adventista para ocho países de Sudamérica (División Sudamericana – DSA), los líderes de jóvenes de la Iglesia Adventista en Ecuador (Unión Ecuatoriana – UE), Pastor Fabricio Leao y Pr. Ricardo Peñafiel, de la Misión Ecuatoriana del Sur, junto al presidente de este campo misionero, Pr. Freddy Guerrero, visitaron a los quince jóvenes que entregaron sus vacaciones a “Misión Caleb”, y quienes tienen el objetivo de sembrar el mensaje adventista en este lugar.

Tras una hora de viaje en lancha desde Guayaquil, llegaron hasta la isla Puná, donde los Calebs, se congregaron en el muelle para darles la bienvenida. Los jóvenes alegres, motivados y contentos tras tomarse las “selfies” de rigor con los líderes, comentaron la experiencia de evangelizar Puná. Todos coinciden que compartir sus vacaciones con otras personas lejos de casa, ha sido una experiencia única, esto se evidencia con el saludo cariñoso y alegre que los habitantes de la isla les extienden mientras caminan.

Desde hace más de dos semanas, los puneños (nombre que se da a los habitantes de esta isla), recibieron la visita de los jóvenes Calebs, quienes además de desarrollar actividades comunitarias, también han compartido el mensaje de salvación a la población. Cada tarde, se reúnen en el parque de la cabecera parroquial, donde luego del mensaje y las actividades recreativas, comparten un pequeño refrigerio con los presentes. A este sitio, llegaron los líderes visitantes, quienes dejaron un mensaje a los Calebs. “Jóvenes, felicitaciones por participar de esta Misión Caleb en Puná. Estamos celebrando 10 años de este proyecto de grandes bendiciones y ustedes son aquí, los pies y las manos de Jesús. Permitan que su ejemplo y acciones, sean el canal que conduzcan a otras personas a Dios”, indicó el Pr. Carlos Campitelli en su intervención.

El trabajo de los jóvenes Calebs, complementa un trabajo que hace varios meses, viene realizando la hermandad del distrito Suroeste de Guayaquil en este lugar. Brigadas médicas, entrega de víveres, entre otras actividades, han preparado el terreno en los corazones de los puneños. En estas semanas el trabajo de los Calebs, permitió que dos personas acepten el mensaje adventista, convirtiéndose así en los dos primeros adventistas en esta isla, fruto del trabajo de los jóvenes.

Una apacible brisa marina se siente mientras se acercan al sitio destinado para el bautismo. Al grupo se sumaron Ariana y Freddy, los dos primeros adventistas que sellarían su pacto de amor con Dios a través del sacramento. Los Calebs se encontraban animados. Les dieron la bienvenida a estos dos nuevos hermanos, quienes se sienten en casa y ahora, desean compartir a otras personas en Puná, el mensaje de salvación.

El Pr. Carlos Campitelli entró a las aguas. Junto a él, entraron Ariana y Freddy, listos para su bautismo y comenzar una nueva vida. Quienes estuvieron en la playa y los que estaban en el camino, fueron testigos del nacimiento de estos nuevos hermanos, que además de convertirse en los primeros adventistas en esta isla, serán la luz para otros.

“Caleb es una experiencia, que me ha permitido hacer realidad el sueño de plantar una iglesia”, señala el Pr. Patricio López, líder del distrito Suroeste. “Sin los Calebs aquí, sería imposible plantar una iglesia, con su presencia están impactando llegar a las personas y de esa manera, será muy posible establecer una iglesia en este lugar”, agrega el pastor.

Y así, con la alegría de entregar a dos nuevas personas ante Dios, los Calebs terminan este día con una alegría especial. En el horizonte y a la caída del sol, observamos la silueta de estos guerreros de la fe, que entregaron todas sus vacaciones para decirle al mundo que Dios los ama y quiere morar junto a ellos, por toda la eternidad. [Equipo ASN, Vanessa Castro y Marco Chile]