Brasilia, Brasil… [ASN] Sentado en un sofá, el estudiante Matheus Soares hace los cálculos y llega a un resultado: 957. Para él, no es apenas un número, pero la representación de la cantidad de personas que él ayudó a que conociesen la Biblia y su mensaje. Todo eso comenzó a los seis años, cuando acompañaba al papá, que daba estudios bíblicos. El 2007, después de ser bautizado, decidió formar su propia dupla misionera. En aquella época, su amigo tenía 68 años y, por influencia de su trabajo, vio a una familia de cuatro personas decidir seguir a Cristo y manifestar ese deseo públicamente por medio del bautismo. “Cuando escuchó de Mateo 28:19, algo explotó en mí y sentí que eso tenía que ser dividido”, recuerda. Después de eso, Soares participó de series evangelísticas, clases bíblicas y diversas otras actividades de la Iglesia. Hoy, a los 15 años, él espera terminar el 2014 llevando mil personas a Cristo. Este año, al llegar al Instituto Adventista Transamazónico (latai), en Uruará, en Pará, conoció más de una persona que sería influenciada por él. Lea también: Sudamérica revivió pentecostés con proyecto de oración Una iglesia adventista de niños en Uruguay     Multiplicando: Después de recibir cuatro estudios bíblicos, la estudiante Laise de Souza, de 15 años, escuchó el mensaje que Soares compartió durante un culto y decidió conversar con el joven. “Me hubiese gustado pasar por la experiencia del bautismo antes, pero todavía tenía algunas dudas. Después de escuchar lo que él dijo, me decidí”, puntuó.

Su decisión fue vista este lunes, 31 de marzo, por más de 170 mujeres que participan del Concilio Integrado de los Ministerios de la Mujer, Ministerio del Niño y el ala Femenina de la Asociación Ministerial (AFAM), que se desarrolla en Brasilia. “Ahora quiero que ese mismo mensaje llegue a mi familia”, reforzó Laise. Lo que Matheus Soares hace es el resultado del proyecto Niños Predicadores, iniciativa de la Unión Norte Brasilera, sede administrativa de la Iglesia Adventista para el Norte del País. Donde niños y adolescentes son estimulados a dedicar sus dones y talentos para compartir lo que conocen sobre la Biblia con otros de la misma edad.

Misión para los pequeños “Los niños son los que más aceptan el evangelio. Ellos son parte del reino de los cielos. Ellos no tienen miedo de ir. Es como parte de la Iglesia, ellos fueron comisionados para hacer su parte”, explica la directora mundial del Ministerio del Niño, Linda Koh. Linda eligió las iniciativas desarrolladas en Brasil, principalmente la Escuela Cristiana de Vacaciones, que involucra niños de la comunidad en actividades cristianas, las cuales, de otra manera, tal vez no participaron programas de esa naturaleza. De igual modo, el club de Conquistadores es una forma efectiva de hacer con que chicos y chicas conozcan más sobre Cristo y su amor. El concilio que se extiende hasta el próximo jueves, 3 de abril, también contempla la presentación de otros proyectos y cuenta con seminarios para instruir a las lideresas de cada región administrativa de la Iglesia Adventista en ocho países sudamericanos. “Nuestro objetivo es crear un sentido de misión y mostrar que es necesario que los niños crezcan haciendo discípulos”, argumentó la profesora Graciela Hein, directora del Ministerio del Niño para Sudamérica y una de las organizadoras del evento. Este martes, líderes del Ministerio de la Familia también pasan a integrar parte del evento. Mire la transmisión en vivo del programa en: http://new.livestream.com/adventistaslive/ci2014 Vea abajo el video que muestra un poco del trabajo desarrollado por Matheus durante su infancia. [Equipo ASN, Jefferson Paradello] http://youtu.be/LO5LfEUuP0o