“Cuide los centavos y los pesos se cuidarán solos. Son los centavos aquí y los centavos allá gastados para esto, aquello, y lo de más allá, que pronto suman pesos” (Consejos sobre mayordomía cristiana, p. 271).

En el mundo agitado y dinámico en el que vivimos, a veces dejamos que algunos detalles pasen desapercibidos. Estos detalles bien administrados optimizan nuestros ingresos y disminuyen los gastos. Cuidar lo poco, los detalles, hace la diferencia para lograr el éxito financiero. Si usted observa los siguientes ítems, encontrará un camino hacia la economía familiar.

1. Evite comer fuera de casa

Eso puede parecer placentero y brindar momentos de felicidad con los amigos y familiares; sin embargo, el costo de una comida en el restaurante es mucho más caro si se lo compara con el mismo tipo de alimentación hecha en casa.

2. Utilice los cupones de descuento

Algunas personas tienen vergüenza de utilizar este tipo de bonos, pero recuerde: descuento es descuento, independientemente de la forma en la que lo recibimos. Puede ser por medio de una promoción o de un cupón. Comprar un servicio o producto de calidad con un valor más asequible es lo que importa.

3. Si tiene arreglo, no compre uno nuevo

La cultura estadounidense exportó al mundo el concepto de que el tiempo es dinero. Eso puede ser verdad en algunas ocasiones, pero no en todas. Es preciso evaluar y medir qué vale más: arreglar o comprar un ítem nuevo. Tomar la decisión correcta ayuda a ahorrar algún valor.

4. Hable de finanzas con su familia

Existen algunos tipos de temas que son verdaderos tabúes dentro de casa. Por eso, tener conversaciones abiertas sobre finanzas con los hijos y el cónyuge es una forma de evitar ciertos disgustos familiares. Muestre el presupuesto, hable sobre los planes de cambiar el auto, irse de vacaciones, entre otros gastos. Demuestre la importancia de planificar y ahorrar para poder alcanzar los objetivos.

5. Utilice el método 50-15-35

50% para gastos mensuales;

15% para inversiones o pago de deudas;

35% para su estilo de vida;

Este método ayuda a registrar y visualizar los gastos por actividades. Su uso contribuye para definir qué estilo de vida es posible tener y cuál podrá ser adoptado a medio y largo plazo.

6. Anote todos los gastos

Ser minucioso en los registros de los gastos puede parecer mezquino y sin sentido, pero con el pasar del tiempo usted tendrá la información necesaria para tomar decisiones de cómo maximizar los recursos financieros.

7. No tenga servicios que no utiliza

Cuidado con las promociones en las que solo se pierde. Banda ancha de 100 MB, por ejemplo. ¿Utiliza el 100% del paquete? Si no lo utiliza, negocie con la operadora y reduzca su cuenta. Si su consumo es mayor que el contratado, no pague el excedente, pues es mucho más caro. Por eso, contrate paquetes adecuados a su perfil. Este consejo también sirve para los servicios de streaming.

8. No desperdicie

El artículo publicado en Brazilian Journal of Food Technology , titulado “Pérdidas y desperdicios de alimentos: reflexiones sobre el actual escenario brasileño”, afirma que “Una familia brasileña compuesta por cinco personas gasta, en promedio, R$ 1.532,50 en alimentación por mes y, al considerar el promedio mundial del 30% de desperdicio, se evidencia que, de este valor, R$ 459,75 se gastan en alimentos que terminan en la basura. O sea, se pierden casi R$ 500,00 del ingreso familiar” (Santos et al., 2020, p. 5).

Así, servir o preparar solo lo que será consumido ayuda en la reducción de los gastos. Si usted se encuentra en ese promedio, podrá economizar aproximadamente R$ 6.000,00 por año solamente en lo referido a la alimentación.

9. No compre sin investigar

Comprar por impulso nunca fue y nunca será la mejor opción. Por lo tanto, busque tener descuentos mediante el pago en efectivo. Muchas veces, pagar con la tarjeta de débito es más barato que utilizar la tarjeta de crédito. Investigar, comparar y tal vez cambiar de marca, si fuere el caso, son iniciativas que tendrán como resultado el ahorro para su bolsillo.

10. Evite pagar multas e intereses

Tenga cuidado con los intereses que parecen ser pequeños, pero que son verdaderos agentes corrosivos de su presupuesto. Para ejemplificar, piense en una factura de R$ 50,00 que, si se paga con atraso, genera multas e intereses de R$ 5,00. Parece poco, solo R$ 5,00. Sin embargo, cuando se observa la tasa, la misma es equivalente al 10%. En el país donde la tasa básica de intereses, la tasa Selic, es del 2% al año, usted necesitaría de aproximadamente cinco años con el mismo valor invertido para recuperar el pago de la multa.

Trate de orientarse por estos consejos y mantenga sus finanzas al día.

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Referencias

SANTOS, Karin Luise dos et al. Perdas e desperdícios de alimentos: reflexões sobre o atual cenário brasileiro. J. Food Technol., Campinas, v. 23, p. 1-12, e2019134, 2020. Disponible en http://www.scielo.br/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1981-67232020000100300. Acceso el 10 enero de 2021.  Epub Mar. 13, 2020.  https://doi.org/10.1590/1981-6723.13419