Noticias Adventistas

Institucional

Guerra finita – Spoiler de los héroes normales

La Biblia habla de héroes mucho más increíbles de lo que se pueda imaginar. Y lo mejor: ellos fueron increíblemente osados ​​en su cotidiano.


  • Compartir:

Una de las artes de la larga Guerra Infinita (Foto: Divulgación / Marvel Studios)

Los superhéroes generan dinero, mucho dinero.

La taquilla alcanzó los cinco mil millones de dólares ganados solo con las producciones cinematográficas sobre ellos en 2017. Desde la última década, cuando Marvel migró a la pantalla grande, su facturación sobrepasó cifras estratosféricas, y no nos sorprende que después de muchas películas acerca de personajes aislados, finalmente, juntara a sus superhéroes en el último lanzamiento hollywoodiano: la película Vengadores: Guerra Infinita.

A decir verdad, y en algún momento de nuestra vida, todos nos encontramos con nuestra imaginación volando libremente, literalmente volando. El que nunca se imaginó en una capa roja, o en un auto supersónico, o con poderes extraordinarios, que tire la primera piedra. Porque el ser humano queda fascinado con lo imposible, le gusta lo imponderable y paga para estar en contacto con lo sobrenatural.

Lea también:

Believers ateus [Creyentes ateos]

¿Quiere ver algo curioso? De acuerdo con una encuesta hecha por el Instituto Barna al final de 2017, el número de ateos entre los adolescentes se duplicó, comparado con otras franjas etarias. O sea, siendo uno de los principales públicos al que está dirigida la película Vengadores: Guerra Infinita, cuanto menos los millenials creen en Dios más se interesan por los superhéroes. Dando la espalda al teísmo, sus criaturas están prefiriendo elegir divinidades imaginarias. Esto es tan intrigante que nos obliga a prestar atención inmediatamente.

¿Por qué nos proyectamos tanto en lo que se muestra omnipotente? ¿Y por qué nos seduce la imbatible y épica salvación de la humanidad? Porque creo ser la mayor prueba de que somos criaturas elaboradas cuidadosamente por un Creador. Solo que, infelizmente, desde la serpiente traicionera que prometió un paraíso de cartón, la falsificación del mal sobre el bien se volvió común.

¡A mí también me gustan las historias! ¿#quiénnunca? Pero esta avalancha de entretenimiento construido sobre el heroísmo legendario pone en peligro las mejores y mayores historias del universo. Todas ellas están agrupadas y accesibles en el más fascinante libro de súper historias: la Biblia. ¿Y lo mejor de todo? Esas historias son absolutamente reales, creíbles y divinas. Además de eso, la Palabra de Dios presenta, desde la primera letra hasta la última palabra, una Guerra Infinita, y con su fecha de validez vencida. ¿Cómo es eso? El colapso universal llamado pecado ya tiene su exterminio anunciado por medio del mayor spoiler de un final feliz que alguna vez haya existido: Jesús en la cruz del Calvario.

¿Quiere más? Existen aspectos destacados increíbles que benefician a los héroes bíblicos en contraste con los espejismos de Marvel:

Los héroes bíblicos son posibles. Además de humanos, de Pedro a José, o Daniel a Ester, todos revelan la dependencia de Dios como fórmula no-secreta para su éxito. Esto también está al alcance de todos nosotros. ¿Ya leyó Filipenses 4:13?

Los héroes bíblicos no son súper. La Biblia es demasiado realista para no disfrazar las luchas, pecados, caídas y valles de los muchos que por ella desfilan. ¿Jacob en Jaboc? ¿Juan el Bautista angustiado en prisión? ¿Sansón dando su kriptonita en bandeja de plata a Dalila? ¿Y Moisés golpeando la roca? La lista es grande. No es para menos que, en Romanos 7:24 y 25, un “casi-súper Pablo” declare su completa falibilidad humana y su absoluta dependencia de Cristo.

Los héroes bíblicos son mortales. Ni el 1% de ellos alcanzaron la inmortalidad. ¿Alguna vez pensó en eso? Además de Enoc, Elías y Moisés, todos los demás nacieron, vivieron, osaron, envejecieron y murieron. En este ciclo indeseable, aunque realista, de la vida humana nuestra mortalidad nos iguala. Es lo que está en Salmos 89:48. Pero esto también es un soplo de esperanza capaz de recordarnos el verdadero destino eterno que nos espera (Apocalipsis 21:4).

Los héroes bíblicos son dependientes. Ninguno de los grandes ejemplos bíblicos se hizo solo. Todos dejaron en claro la verdadera fuente de su fuerza invencible: el poder de Dios. No fueron fruto del azar que los benefició con poderes superiores a los demás, sino que fueron el resultado de la providencia divina que los bendecía mientras permanecían en el Señor. En 1 Juan 4:4 puede confirmar eso.

Los héroes bíblicos usan ropas normales. Sin capas mágicas, máscaras de disfraces, o armaduras contra rayos cósmicos, los grandes nombres de la Biblia hacían de la normalidad su mayor proximidad con las personas. El mayor capítulo sobre los héroes bíblicos está en Hebreos 11. ¡Es increíble cómo seres comunes pueden atreverse a tanto! José, Eliseo, David, Noemí, Débora y tantos otros, hicieron cosas extraordinarias con una visión ordinaria. Vestido como un mero tibsita, Elías frustró al rey, Jonás decepcionó a los ninivitas, y Pablo sorprendió a los griegos. ¿Para qué parecer sobre humano si el poder no es humano?

Los héroes bíblicos no salvan a la humanidad. Termino con esta, la más importante. Si el entretenimiento cinematográfico hace de un superhéroe el salvador del mundo, la Biblia muestra lo contrario con sus héroes de la fe. Todos a su manera, sin excepción, apuntaron hacia el verdadero Redentor del Universo: Jesucristo. Los actos de heroísmo bíblico brillan por las páginas sagradas. Todo profetizando o recordando la mayor acción sobrenatural de la salvación de la humanidad expresada en el Dios-hombre sobre la cruz manchada con nuestra sangre. ¿Cómo termina todo? El gran final de esta batalla épica está en la Biblia: Apocalipsis 1:5. ¡Solo Jesús vence al mal, porque ya venció!

Por lo tanto, ¡que vengan los créditos finales! Exactamente donde los nombres de los actores y actrices, absolutamente humanos, que confirman que todo es resultado de la imaginación fantasiosa. Simplemente es el poder del séptimo arte. Pero lo más importante es recordar siempre que las criaturas jamás serán capaces de ser poderosas como el creador. Además de eso, y aún más interesante, después de la lista interminable de nombres falibles (como el mío y el suyo, ¡estampados allí!), solo para quienes se quedan hasta el final de la historia, una revelación sorpresa será exhibida en la pantalla de nuestros sueños:

La Guerra es Infinita. Pero, con Dios, su felicidad será ETERNA.

Referencias:

https://omelete.com.br/filmes/noticia/universo-marvel-do-cinema-e-a-primeira-franquia-a-chegar-a-us-5-bilhoes-nos-eua/

https://pleno.news/opiniao/jr-vargas/coluna-jr-vargas-ateismo-crescente-entre-os-adolescentes.html

 

Odailson Fonseca

Odailson Fonseca

ON

Innovación joven bajo una perspectiva inteligente

Teólogo y publicitario, dirige el departamento de Comunicación de la Iglesia Adventista para el estado de Sao Paulo, Brasil. @odailson_ucb