Gratitud: uno de los ingredientes de la felicidad
¿Usted es una persona agradecida? Todo ser humano (o por lo menos la mayoría) parece buscar la felicidad. Sin embargo, no todos tienen el hábito de la gratitud. Sucede que la felicidad y la gratitud poseen una relación íntima. Es un poco complicado,...
¿Usted es una persona agradecida?
Todo ser humano (o por lo menos la mayoría) parece buscar la felicidad. Sin embargo, no todos tienen el hábito de la gratitud. Sucede que la felicidad y la gratitud poseen una relación íntima. Es un poco complicado, para no decir imposible, ser feliz sin ser agradecido.
Esa relación entre gratitud y felicidad tiene hasta una relación fisiológica. Estudiosos verificaron que el sistema de recompensa del cerebro, que nos deja felices y satisfechos, se activa tanto cuando recogemos buenos resultados de cosas que nosotros mismos hacemos como cuando experimentamos los resultados de lo que otras personas hacen por nosotros. Cuando pensamos en las cosas buenas que las personas hacen o hicieron por nosotros, ese sistema se activa, así como cuando recordamos nuestros propios éxitos personales.
Infelizmente, mucha gente se concentra en las cosas negativas de la vida, en los fracasos, en las dificultades, en las cosas malas que las personas ya les hicieron y todavía no comprenden el por qué viven deprimidos. Es claro que una mente que se concentra en lo malo que hay también producirá sentimientos malos.
Por otro lado, aunque esa sea una visión realista o aunque yo no tenga de qué realmente enorgullecerme, pues no acostumbro a tener éxito en lo que hago, pensar que alguien hizo algo bueno por mí o en cosas buenas que me suceden y darles valor es una forma de alimentar nuestra mente (y de forma bien específica, nuestro cerebro) para que produzca un sentimiento bueno.
Imagine cuán diferente sería su día si la primera cosa que usted hace al despertarse fuera agradecer. Imagine si de hora en hora usted dedicara algunos segundos a ser agradecido por las cosas que le sucedieron en la última hora. Sea por haber concluido una tarea, haber recibido una llamada telefónica esperada o hasta por haber enfrentado una situación difícil que le podrá ayudar a madurar como persona.
En la Biblia está escrito “Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús”. 1ª Tesalonisenses 5:18. Y Dios desea que seamos personas felices, que tengamos mentes saludables, sin emociones y pensamientos que destruyan nuestro ser y consuman nuestras energías.
Link do estudo citado: http://www2.uol.com.br/vivermente/