Colportora: "Mi sueño, ser médico"
El colportaje permite que jóvenes puedan desarrollarse de manera integral y financiar sus carreras profesionales.
Jhoselin, conoció sobre el colportaje a los 12 años, gracias a un misionero (estudiante de teología) de su iglesia. Él compartió con ella toda la información sobre el proyecto "Sueña en Grande" y los resultados que obtendría, como costearse una carrera universitaria.
A los 16 años, inició su primera experiencia colportando en el centro oeste de la ciudad de Lima. Desarrolló nuevas habilidades de comunicación, generó ganancias y conoció nuevas personas, con quienes compartía la Palabra de Dios. Además, aprendió administrar su dinero y entregar sus diezmos y ofrendas.
Lea también:
- No existen límites para Dios: Sueña en Grande
- Joven colportor: “Es momento de dejar a un lado los prejuicios y predicar del amor de Cristo”
En el 2020 llegó la pandemia. Sin embargo, Jhoselin decidió continuar colportando y ser fiel a Cristo. Al finalizar la campaña, logró obtener un bonificación gracias al proyecto "Sueña en Grande", permitiéndole estudiar la carrera que tanto anhelaba. Además, gracias a los materiales que ella compartía, dos familiares decidieron ser bautizados.
"Mi experiencia en el colportaje me hizo depender de Dios, a colocarlo en primer lugar, es él la base del éxito... ¡Sé un colportor, sé un misionero!" comentó Jhoselin, que actualmente gracias al proyecto "Sueña en Grande" estudia la Carrera Profesional de Medicina Humana de la Universidad Peruana Unión.
De esta manera, el colportaje es una herramienta de formación integral. Impacta la vida de muchos jóvenes, y gracias a la venta de libros salvan vidas para Cristo. Asimismo, muchos de ellos actualmente son profesionales, aman su vocación y sirven al prójimo.