El día 31 de mayo nuestros diversos colegios adventistas celebraron con emoción el Día sin Tabaco, una fecha clave para compartir un mensaje fuerte en materia de salud y al mismo tiempo extender una invitación para conocer al Creador.

Cuerpo y templo

Como cristianos sabemos que el cuerpo es templo del Espíritu Santo, por lo cual es importante para nosotros como iglesia instar a la comunidad a hacer conciencia sobre el uso de tabaco y lo perjudicial que es para el organismo.

Al revisar el panorama actual con tristeza podemos hablar de Chile, donde un 40% de la población entre los 12 y 60 años es fumadora, lugar que  además tiene como edad promedio del primer consumo los 13 años. Sin duda son datos alarmantes.

Es por esto que diversos colegios adventistas del sur de Chile se movilizaron en el marco de esta celebración, a fin de concientizar a la ciudadanía.

Colegios movilizados

En Villarrica tanto alumnos como profesores pusieron un alto a las actividades educativas para impactar a la comunidad con un stand basado en los 8 remedios naturales, entregando al mismo tiempo alimento espiritual como lo son 1.500 ejemplares de “la última invitación''.

Una instancia que bien llamó la atención de la gente, donde 10 personas solicitaron estudios bíblicos, y algunos incluso consultaron si es que sus hijos podían asistir al Colegio Adventista.

Un evento que bien fue replicado en nuestros diversos espacios educativos en ciudades como Temuco, Angol, Castro, entre otros. 

Oportunidad para llevar el mensaje

“Es un beneficio múltiple, tanto para la comunidad, la cual quedó impresionada con el evento, los profesores que utilizaron sus dones a disposición del programa y los alumnos los cuales se vincularon a la misión con mucha alegría”. Añadió el Pastor Institucional del Colegio Adventista de Villarrica, José Venegas.

Esta oportunidad de igual manera fue disfrutada al máximo por nuestro alumnado, ya que tanto chicos como chicas pudieron aportar entregando esperanza a las personas, ya sea haciendo entrega del libro misionero o bien extendiendo una manzana.

Sigamos compartiendo el mensaje de esperanza al mismo tiempo que aportamos en materia de salud, llamando la atención de quienes son ajenos a nuestra fe, Dios nos permita seguir encabezando este tipo de iniciativas contingentes.