El 18 de septiembre es una fecha muy especial en Chile. Se celebra el Día de la Independencia y es una festividad llena de tradiciones, alegría y unión familiar. Durante esta época, las calles se llenan de coloridos adornos, se preparan comidas típicas como empanadas, sopaipillas, asados y se realizan bailes y juegos tradicionales. Es un momento para celebrar la identidad chilena, recordar la historia y disfrutar de la compañía de seres queridos, sin embargo; hay un porcentaje de la comunidad que no disfruta de estas fiestas.

De esta manera Infusion Hope, el centro de influencia que se dedica a promover la alimentación saludable y la comunicación constante con Dios, ha llevado a cabo una admirable iniciativa junto a la Iglesia Central de Temuco al compartir de forma solidaria con el hogar "Navidad: madres adolescentes" durante las fiestas patrias del 18 de septiembre.

Infusion sirviendo en el hogar

En este hogar se acoge a adolescentes embarazadas que no han sido recibidas por sus familias, brindándoles el apoyo y la contención que tanto necesitan ellas y sus pequeños hijos.

La labor realizada por el equipo de Infusion Hope y la Iglesia Central es un gesto de solidaridad y amor al prójimo, demostrando el compromiso de llevar esperanza y fe a quienes más lo necesitan. Mostrando el carácter de Cristo en estas acciones desinteresadas.

Los participantes de esta valiosa iniciativa, entre los que se incluyen Christian Oleynick, Danitza Yáñez, Andrea Parra, Jéssica Moreira, y cuatro jóvenes de la central: Benjamín Gómez, Josué Castro, Ana Henríquez y Lorena Vio, se propusieron celebrar el espíritu de la chilenidad a través de una fiesta especial, compartiendo comidas y juegos típicos con las jóvenes madres y sus hijos.

La comida preparada para la ocasión incluyó una variedad de delicias tradicionales chilenas, como empanadas de horno, pajaritos dulces, mote con huesillo, alfajores, sopaipillas, pebres y refrescantes bebestibles.

Además, como muestra de cariño y preocupación por el bienestar de las jóvenes madres, se les entregó un kit de aseo personal que contenía elementos esenciales para su cuidado diario, incluyendo una Biblia especialmente diseñada para niños y niñas.

La labor solidaria llevada a cabo no solo dejó felices a quienes fueron visitados, sino que también brindó a los voluntarios una profunda satisfacción al saber que estaban haciendo la obra de Dios de una manera tangible y amorosa.

Dando amor con acciones

Esta iniciativa busca ser un claro ejemplo de cómo la comunidad adventista busca estar cerca de aquellos que más lo necesitan, compartiendo la luz del evangelio de una forma práctica y significativa.

Infusion Hope de esta manera se muestra como un brazo ayudador que es parte de la Iglesia Adventista, abierto a la comunidad para poder compartir el amor de Dios a través de la alimentación, talleres, y acciones solidarias. Buscando reflejar el caracter de Jesús a la comunidad.