Comunidad nativa de Epemimo, en Perú, participó de la semana Viva con Esperanza.

Chiclayo, Perú [ASN] La comunidad nativa de Epemimo se encuentra a 20 minutos de la carretera que va a Chiriaco en el norte del Perú. Aquí vive el profesor de nivel primario, Luis Fernando Yagkug Tsajuput y su pareja. En el mes de abril de este año, ellos recibieron la visita de Porfilio Yagkug Tsajuput, hermano de Luis, quien había entregado su vida a Dios el 29 marzo del presente año. Porfilio les habló de Dios, de los cambios que Él estaba haciendo en su vida y en su hogar, y les invitó a dedicar un tiempo para aprender más acerca de Dios. Así, dejó plantada la semilla en este hogar. Desde aquella oportunidad Luis empezó a dedicar tiempo a diario para leer la Biblia, y así lograr conocer a ese Dios que cambió la vida de su hermano.

Mientras leía el libro sagrado, surgieron temas que le intrigaban como el día de reposo, el bautismo, entre otros. Preguntó a sus pastores en repetidas oportunidades, pero sus respuestas no lograron convencerlo.

Luis, deseoso de conocer más acerca del Dios maravilloso de quien su hermano tanto le hablaba, empezó a orar para pedirle ayuda a Dios a fin de poder comprender lo que leía. En varias oportunidades había visto a su colega de trabajo, el profesor Samuel Alaya Terán, de quién sabía que era adventista, visitar a su vecino, el señor Marco Taan para estudiar la Biblia. Por años lo había conocido pero nunca habían tratado de temas religiosos pues los había esquivado, por lo que sentía vergüenza de hacerlo ahora.

Un sábado por la tarde del mes de octubre del 2014, el feligrés adventista de nombre Samuel, salió en busca de personas deseosas de conocer a Dios. Subió a su moto y sintió que el Espíritu Santo le decía que fuera a Epemimo, lugar que había visitado hace un año, cuando construyeron la carretera hasta esta comunidad nativa.

Samuel fue de puerta en puerta invitando a las personas a estudiar las Sagradas Escrituras. Llegó a la casa de Luis, lo saludó al reconocerlo, y luego de una amena conversación le dijo el motivo de su visita. El rostro de Luis irradiaba alegría, el deseo ardiente de su corazón de aprender más estaba siendo contestado. Fue así que, Samuel director del grupo Chiriaco, empezó a hablarle de Dios, y comenzaron el estudio bíblico La fe de Jesús.

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A medida que iba aprendiendo más acerca de la verdad, Luis le contó a Samuel que deseaba compartir con sus vecinos este mensaje maravilloso. Estaba esperando esta oportunidad. Samuel le contó que se aproximaba una semana muy especial Viva con Esperanza, una semana en la cual se enseñaría la palabra de Dios. Luis al escuchar esto le preguntó si había la posibilidad de hacer esta semana en su comunidad Epemimo; y si era posible, él prestaría su casa, motor y gasolina- ya que en Epemimo no hay energía eléctrica. La respuesta fue positiva, Samuel formó un grupo de jóvenes adventistas Caleb, de 4 miembros misioneros, y con ellos iniciaron dos semanas para que las personas de Epemimo puedan aprender a vivir con esperanza. Luis ya tomó la decisión de bautizarse junto con su esposa, por lo que estarán contrayendo matrimonio civil. [Equipo ASN, Jaime Vilcapoma con informaciones de Angel García]