Con el objetivo de brindar soporte al hospital regional de Temuco, Doctor Hernán Henríquez Aravena, la agrupación de Jóvenes Adventistas de la Universidad Mayor (Jaumy) ha dado lugar a una solidaria jornada de Vida por Vidas.

Vida por Vidas

Vida por Vidas es una iniciativa de la Iglesia Adventista que invita a la comunidad a extender aportes de sangre para los centros de salud, de esta manera compartiendo vida con el prójimo mediante la donación.

Este es un proyecto de carácter internacional y tiene como objetivo promover una mentalidad de solidaridad y empatía hacia la donación de sangre entre los adventistas y la sociedad en general. Mediante la realización de campañas de recolección de sangre, eventos educativos y diversas actividades de concientización.

La iniciativa ha logrado difundir un mensaje global de unión y compasión. Su enfoque se basa en cultivar una cultura de generosidad, donde cada donante se convierte en un héroe anónimo, salvando vidas y extendiendo una mano amiga a aquellos que más lo necesitan.

Un recurso que salva vidas

La donación de sangre es un acto de generosidad y solidaridad que desempeña un papel vital en el cuidado de la salud de las personas. Proporciona un recurso esencial para el tratamiento de enfermedades, cirugías, accidentes y complicaciones médicas graves. Sin embargo, a pesar de su importancia, la donación de sangre a menudo se encuentra en escasez en muchos lugares, incluido Chile.

La Iglesia Adventista frente a la problemática busca colaborar y hacer frente a la escasez de este vital recurso, de esta manera los Jóvenes Adventistas han dado lugar a diversas campañas en el sur de Chile brindando una mano al sistema de salud.

Jaumy aportando

Jaumy, la agrupación de Jóvenes Universitarios Adventistas dio lugar a una exitosa convocatoria Vida por Vidas en la Universidad Mayor de Temuco, espacio donde se pudo apreciar una gran fuerza joven colaborando con este solidario fin.

Así comenta Catalina Mella, líder de Jaumy con las siguientes palabras “Ha sido una iniciativa muy positiva que nos emocionó a todos quienes participamos”.

“El personal de salud fue superagradecido y siempre con gran disposición de orientarnos en todos los ámbitos, sin duda lo volvería a hacer, voy a esperar cuatro meses para poder hacerlo de nuevo”.

“Se notó la mano de Dios en cada espacio, Él estaba detrás de este acto y por supuesto nos fuimos con el corazón lleno por poder ayudar”. Agregó la líder de Jaumy.