Bajo el enfoque de trabajo administrativo, técnico y misional, más de 500 hombres y mujeres fueron capacitados en el Encuentro Nacional de Secretaría Distrital organizado por la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Perú, a través de sus dos sedes administrativas: Unión Peruana del Sur (UPS) y Unión Peruana del Norte (UPN). Este evento tuvo como escenario el auditorio “Alva y Alva” de la Universidad Peruana Unión (UPeU) en la ciudad del Lima, y se desarrolló del 21 al 22 de marzo.  

Debido a que el Departamento de Secretaría es sumamente técnico, y conlleva un alto nivel de información y procedimientos muy específicos; el objetivo de este evento fue reunir a los secretarios de los distritos del interior de territorio peruano para reforzar sus conocimientos, motivarlos por su llamado al servicio y fortalecerlos espiritualmente.

El amor de Dios los moviliza

Desde las regiones más alejadas del Perú, los secretarios de los templos adventistas viajaron por largas distancias y vencieron condiciones físicas o climáticas, con el propósito de asistir a este evento para incrementar sus conocimientos durante los dos días de seminarios. Además, durante los programas devocionales los mensajes bíblicos fortalecieron su fe y fueron guiados a renovar su compromiso con la predicación del evangelio desde sus labores.

Capacitadores para la misión

El Encuentro Nacional de Secretaría tuvo como capacitadores a especialistas y líderes de la Iglesia Adventista del Séptimo Día: pastor Edward Heidinger (Secretario Ejecutivo de  la División Sudamericana), Ing. Rodrigo Romaneli (Secretario Asistente de la División Sudamericana), pastor Harry Streithorst (Secretario Ejecutivo de la Unión Sur Brasileña) y pastor Evaldino Ramos (Secretario asociado de la División Sudamericana). Los asistentes accedieron a seminarios y paneles de preguntas, logrando una buena interacción con los capacitadores.

El trabajo de la Secretaría de la Iglesia Adventista del Séptimo Día es fundamental para coordinar y fortalecer la misión global de la iglesia, promoviendo la unidad, el servicio y el compromiso con el evangelio; su labor trasciende fronteras, impactando vidas y comunidades en todo el mundo. En continua oración por los hombres y mujeres que desempeñan esta hermosa misión.