En la Iglesia Adventista las hermanas sin duda tienen un lugar importante en el ministerio de amor y esperanza. Donde múltiples mujeres dan un paso al frente proclamando el dulce mensaje de Cristo y su sacrificio.

De esta manera es como el Departamento del Ministerio de la Mujer en la Iglesia Adventista tiene el rol de defender, desafiar y promover los valores Cristianos; inspirando a otras a alcanzar su máximo potencial de la mano de Cristo.

Un espacio seguro en el sur

El Proyecto VIVE siendo parte de este ministerio propone acciones y fechas a las hermanas para dar lugar a momentos de consagración y oración en grupo. Proporcionando un espacio seguro de apoyo y compañía.

Promoviendo valores como el compañerismo, proporcionando palabras de aliento junto con acciones sinceras. Un grupo lleno de cariño que tiene el objetivo de involucrar a Cristo en la vida de las mujeres que componen el proyecto, llevándolas a estudiar la Biblia.

Motivando así mismo a que estos grupos perduren, crezcan y se repliquen con el tiempo en otros espacios, llevando el mensaje poderoso de Dios a cada vez más mujeres, para abrir corazones y cambiar vidas.

Este mismo Proyecto VIVE se ha celebrado en diferentes espacios del sur de Chile en el campo de la Asociación Sur Austral. En esta ocasión el Colegio Adventista de Angol dio lugar a esta provechosa iniciativa.

Reconfortando con la palabra

Donde profesores y asistentes docentes decidieron participar y ser parte de este reconfortable y esperanzador proyecto, que motiva a un grupo poderoso de mujeres a escudriñar la Sagradas Escrituras y brindar apoyo al prójimo. En una actividad liderada por las profesoras Luz Margarita, Claudia Villaseñor y Ruth Contreras.

De esta manera el pastor Cristhian Trujillo valora esta preciosa iniciativa por su buena acogida

“En el Colegio Adventista de Angol dimos lugar al Proyecto VIVE, donde las damas de nuestro colegio pudieron compartir momentos agradables de convivencia, apoyo emocional y espiritual".

El extenso sur de Chile se encuentra hambriento de la palabra de Cristo, por esto es el deber de nuestra Iglesia Adventista acercar el mensaje a los distintos grupos de interacción que tenemos. Una palabra de aliento llena de esperanza y fe puede cambiar la vida a tus colegas de trabajo, amigos y familia.