El colportaje ha sido durante muchos años un método sumamente efectivo de difusión de nuestra fe en Dios y el mensaje de salud por medio de los remedios naturales.

Prácticas que al mismo tiempo han sido realizadas por múltiples jóvenes a fin de pagar sus estudios mientras extienden el evangelio a la comunidad. Disfrutando de una experiencia provechosa tanto para el colportor como para el prójimo.

Una labor bien valorada que destaca nuestra Iglesia Adventista del Séptimo Día y su casa editora en Argentina, en el marco de la celebración de los 125 años de Asociación Casa Editorial Sudamericana (ACES), destacando el trabajo de una humilde sierva del Señor a nivel internacional.

Se trata de la hermana Berta Meneses, colportora de la Asociación Sur Austral de Chile quien recibió un reconocimiento por sus 26 años de trayectoria, difundiendo el mensaje a través del material de publicaciones.

Un material educativo que acerca a la comunidad a nuestras doctrinas mediante literatura que extiende el valioso mensaje de amor y esperanza a quienes aún no conocen a Cristo.

Historia de Berta

De esta forma nuestra hermana Berta Meneses atiende al llamado del Señor en el año 1997, luego de trabajar por cuatro años en una fábrica de ropa. Una labor que tuvo que abandonar debido a los vapores de las planchas, los cuales generaron problemas en sus bronquios, sin embargo esto sería el principio del plan de Dios.

Ya que en busca de un nuevo trabajo un hermano de iglesia le invitó a acercarse al mundo literario, siendo parte de la Editorial Pirámide, aceptando el desafío y preparándose para vender. Viviendo su primera experiencia en este rubro.

Luego de un tiempo de haberse integrado a este mundo, a nuestra protagonista le comentarían en su trabajo que “un buen vendedor debe saber vender todos los libros”. Sin embargo la fidelidad y determinación de la hermana Berta hicieron que ella respondiera “yo no puedo vender libros que vayan contra mis principios”.

Negándose totalmente de hacer difusión de material basado en espiritismo, adivinación y recetarios con alimentos perjudiciales para la salud, entre otros. Libros los cuales se negó tajantemente a difundir, por ir en contra de sus creencias.

La hermana Berta luego de negarse a vender estos libros tiempo después se acercaría al pastor Josué Chandia para compartir su situación.

"¿Qué es el colportaje?"

El pastor luego de oírla sugiere a la hermana Berta que se una al colportaje, a lo que ella responde “¿Qué es el colportaje?”.  En ese momento Berta no esperaba que su vida estuviera a punto de cambiar, y es que ese fue el preciso instante en el que nacería nuestra destacada colportora.

El pastor Josué al ver el interés de ella la invitaría a una capacitación que tuvo lugar en la ciudad de Temuco, instancia a la cual acudiría a finales del año 1997.

Una vez terminada la escuela de colportaje, comenzaría nuestra hermana a compartir el mensaje, el cual en un principio no tuvo buena acogida, ya que pese a su previa experiencia vendiendo libros e incluso ganando premios por su desempeño en anteriores instancias no lograba los resultados esperados.

Es por esto es que comenzaría a pedir ayuda a otros colportores, para poder aprender a compartir la gran verdad mediante los textos. Con el tiempo Berta tendría éxito en esta tarea, así mismo aprendiendo y comprendiendo una nueva lección.

La dificultad para difundir este material de esperanza, es porque cada libro tiene dentro de este una gran verdad, una que al enemigo no le gusta, creando dificultades para abrir puertas y corazones al mensaje.

“Qué diferente fue para mi entender esto, ¿Señor tú necesitabas que yo entendiese esto verdad?”. 

Cristo tenía ya un plan, pese a lo difícil que fue al comienzo comprender esta idea, esta ayudó a que Berta entendiera que debía depender cada día de Dios para poder trabajar en este ministerio.

Berta siguió trabajando, haciendo amistades dentro del área de publicaciones, compartiendo el evangelio, encontrando compañeros de esperanza quienes entendían la importancia del culto matutino y el estudio de la biblia.

Nuestra hermana comenta que su trabajo ha sido de bendición para la comunidad y destaca una experiencia en especial.

Una instancia donde diversos colportores fueron movilizados hacia una zona de campo, la cual vivía una preocupante sequía, debido a la baja del nivel de agua en la represa. 

Los colportores compartieron el mensaje de esperanza junto con material educativo, y la comunidad entendió el poder de la oración y fue testigo de cómo un día sábado volvió a llover.

La comunidad local y los colportores se alegraron en gran manera. “Sí, Dios escuchó nuestras oraciones, y que maravilloso, las personas van a poder creer en la oración y van a leer nuestras revistas”. Expresó nuestra colportora en ese emocionante momento lleno de felicidad.

Berta sin duda fue una fiel herramienta para el Señor, siendo finalmente invitada a colportar de forma independiente en nuestra Asociación Sur Austral, donde realizaría una destacable labor en Porvenir y Punta Arenas.

Nuestra hermana Berta valora esta bella experiencia que la ha hecho vivir el Señor con las siguientes palabras.

“Quiero agradecer a Dios por la oportunidad que me da de colportar, para mi ha sido de gran bendición, pues me siento privilegiada en medio de este gran conflicto entre Cristo y satanás de servir a Dios a través de este ministerio de la página impresa”. 

Cristo nos permita ser luz en la oscuridad y compartir el mensaje de esperanza tal como lo hizo nuestra colportora ASACh, hermana Berta Meneses, pidamos a Dios la fuerza y determinación y Él nos la dará.

El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón, a pregonar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos; a poner en libertad a los quebrantados. (Lucas 4: 18)