En Ecuador vigilia virtual anima y motiva a jóvenes adventistas
Cientos de jóvenes decidieron aferrarse y confiar su vida espiritual a Dios con una vigilia en cada Iglesia Adventista que comprende la Misión Ecuatoriana del Sur-MES.
Líderes del ministerio joven junto a pastores distritales organizaron vigilias en sus iglesias con el propósito máximo de iniciar el año entregando a Dios todos los proyectos que se van a realizar durante el 2021 y, a su vez, fortalecer la unidad de los miembros de diferentes edades con el Ministerio Joven.
De esta manera, el pasado sábado 30 de enero los jóvenes adventistas participaron de esta actividad espiritual con el lema “Llegó la hora”, pero no solo ellos asistieron a esta vigilia si no también tuvieron el privilegio de invitar a sus padres y amigos, como fue el caso de Joel Quinto, líder de la Iglesia Adventista de la 27ava en la ciudad de Guayaquil quien invitó a sus padres a la vigilia, donde ellos aceptaron el llamado al bautismo, luego de la intervención del pastor distrital Santy Morejón con una predicación que a muchos llevó a la reflexión.
Entre nueve y diez horas duró la actividad que motivó a los jóvenes a integrarse al plan evangelístico propuesto en la Ruta Joven 2021. Los objetivos que desean alcanzar para este año van enfocados en la Red familiar, Sistema de Unidades, Grupos Pequeños y espacio joven. Así fue como líderes de conquistadores de aventureros y jóvenes, áreas que forman parte del Ministerio Joven, buscan su consagración para discipular a los jóvenes y niños que tienen a su cargo.
Ruth Vinueza una de las jóvenes que participaron de la vigilia en la Iglesias Adventistas de la Península expresó lo gratificante que fue pasar en la iglesia, algo que hace mucho tiempo no podía hacer. “Fue muy bonito porque pude compartir un momento muy espiritual con mis amigos que son como mi familia escogida. ¡El poder cantar juntos, escuchar su voz después de muchas reuniones por zoom fue especial! Pude adorar a Dios con una ofrenda musical después de mucho tiempo, y eso me emocionó mucho porque amo cantar”, expresa.
Los temas hicieron reflexionar a la juventud y tomar algunas decisiones en sus vida. “Cerramos con broche de oro, una Santa Cena, donde pude tener una conexión directa con Dios, y, ¡se bautizaron dos jóvenes!”, comenta Ruth . “Creo que una de las cosas más hermosas que uno puede experimentar es ser parte de los líderes jóvenes de la Iglesia, sentir que perteneces a una familia y ver como todos podemos ayudar con nuestros talentos unidos a predicar el evangelio”