El Hospital Adventista de Haití, ubicado a una media hora de Port-au-Prince, fue uno de los tres primeros hospitales en la División Interamericana de los adventistas del séptimo día en aceptar casos de Covid-19. La primera semana luego de que Haití se declaró en emergencia, la institución médica cerró sus puertas para preparar equipos, servicios y operaciones para lo que se avecinaba.

Lo que pronto siguió, dijo el jefe de personal Franck Geneus, fue un aumento de los precios en el mercado para el equipo de protección individual (EPI) y otros ítems clave. Los EPI, críticos para los trabajadores del área de salud en la línea de frente y otros servicios de emergencia, incluyen mascarillas, protectores faciales, gafas protectoras, guantes y más.

“Aunque comenzamos con un stock algo significativo de EPI, sabíamos que sería un desafío reabastecer con regularidad”, agregó Geneus.

La Clínica Adventista Ana Stahl en Iquitos, Perú, la cual se encuentra en la División Sudamericana de los adventistas del séptimo día, cerró por mucho más tiempo como resultado del brote en su área. Según un informe de Reuters, Perú confirmó su primer caso de coronavirus el 6 de marzo y pasó los 10.000 casos para el 14 de abril. A finales de ese mes, la Clínica Adventista Ana Stahl tuvo que cerrar sus puertas por 30 días debido a la escasez de personal. De sus 250 empleados, cerca del 75% estaba de licencia médica.

“Una de las razones por la que tuvieron una tasa tan alta de enfermedad fue que no tenían una cantidad adecuada de EPI”, expresó Greg Hodgson, director del trabajo misionero global de Centura Health. Centura Health es un socio regional de AdventHealth, y de las instituciones médicas en Perú, así como el Hospital Adventista de Haití, que son instalaciones de impacto en el programa de Misiones Globales de AdventHealth.

Hospitales que recibieron ayuda

Aunque mucho del trabajo de Misiones Globales de AdventHealth tiene lugar cruzando el océano, como viajes misioneros, sesiones de planificación estratégica en el lugar y otros puntos de contacto en persona, el equipo vio una oportunidad de continuar apoyando instalaciones de impacto desde su lugar al enviar EPI en colaboración con la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA). Comenzaron al enviar suministros al Hospital Adventista de Haití, al Hospital Andrews Memorial (Jamaica), y al Centro Médico Vista del Jardín (República Dominicana), y luego añadieron a la Clínica Adventista Ana Stahl y al Hospital Adventista Valle de Ángeles (Honduras), entre otros.

“La adquisición local del EPI necesario rápidamente se ha vuelto imposible en nuestro territorio, mayormente debido al alto costo y a la falta de disponibilidad, dos serios obstáculos que ahora impiden un flujo adecuado del servicio apropiado”, dijo Elie Honoré, MD, presidente de Servicios de Atención a la Salud Adventista, Inter América. “Mi reacción es de gratitud y agradecimiento a Dios y a AdventHealth por esta intervención”.

Proceso de envío

Usando su experiencia y su logística combinadas, AdventHealth y ADRA han podido enviar 30 pallets de EPI a hospitales en nueve países diferentes hasta ahora. El proceso comenzó con las Misiones Globales de AdventHealth preguntando a las instalaciones de impacto su nivel de consumo mensual para determinar la cantidad de donaciones, y trabajar en estrecha colaboración con los equipos de la cadena de suministro de AdventHealth para garantizar que los artículos provengan de existencias elegibles para donaciones.

“AdventHealth está feliz de apoyar a entidades de la iglesia y a otros socios claves cuando y donde puede a lo largo de esta pandemia”, dijo Marisa Farabaugh, directora de la cadena de suministro para AdventistHealth. “Como nuestro nivel de inventario y necesidades están en constante cambio, nuestros equipos de cadena de suministro están constantemente evaluando la oportunidad de ayudar a otros, mientras mantenemos nuestro principal foco en proteger a nuestros compañeros de trabajo y a los que trabajan en la línea de frente”.

Esta generosidad contribuyó en gran medida para ayudar a las instalaciones como el Hospital Adventista de Haití.

“El apoyo de AdventHealth fue providencial, por decirlo de alguna forma”, dijo Geneus. “Nos enviaron materiales como mascarillas, batas, jabones espumosos, desinfectantes y otros productos. Para dar una idea más clara, AdventHealth nos proporcionó más EPI que el Ministerio de Salud Pública de Haití”.

Donaciones monetarias

También se realizaron donaciones monetarias para ayudar a que las instituciones consigan EPI de forma local. Por ejemplo, Centura Health donó $30.000 para ayudar a las instalaciones de impacto a conseguir EPI. Fondos adicionales se han destinado a la creación de una guardia para el COVID-19 en la Clínica Adventista Ana Stahl.

“Las necesidades aún están allí para las Misiones Globales de AdventHealth”, expresó Monty Jacobs, director del programa. “Nuestro trabajo no se trata solo de viajes médico misioneros. Se trata de promover relaciones de impacto y colaborar con nuestros socios para que puedan continuar su misión y servir a sus comunidades durante estos tiempos difíciles”.

Hodgson está de acuerdo. “Nuestra declaración de misión dice que estamos aquí para extender el ministerio de curación de Cristo, y como parte de la familia adventista, tenemos la responsabilidad y la oportunidad de apoyar la atención médico adventista ya sea en nuestra comunidad o alrededor del mundo”, comenta.