Libros los hay de todo tipo, para todos los gustos y en diversas plataformas. Están aquellos libros que iniciamos y los terminamos en pocas horas. Otros en los que demoramos un poco más surmergiéndonos en sus delicadas páginas para rescatar lecciones para la vida. Y surge la pregunta, pero, ¿cuánto leemos los latinoamericanos? Según el Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe (Cerlac), bajo el auspicio de la UNESCO, las estadísticas no son alentadoras. Los países latinoamericanos tienen uno de los menores índices lectores en el mundo. Lo que es lamentable.

Las preguntas no quedan solo en los lectores, sino también en la forma de cómo son adquiridos. Por ejemplo: ¿Qué hay del autor? ¿Qué derechos se tiene sobre la obra una vez adquirida? Hoy, 23 de abril, es el Día Mundial del Libro y de los Derechos de Autor. Por esa razón, la Agencia Adventista Sudamericana de Noticias (ASN) conversó con el abogado Augusto Rocha sobre los derechos de autor y esto fue lo que nos dijo:

¿Qué es una obra intelectual?

Es el producto de un esfuerzo intelectual que fue expresado de alguna manera. Este concepto abarca, por ejemplo: música, artes, ciencia, fotografías, textos literarios, sermones, disertaciones y hasta redacciones escolares, entre otros innumerables ejemplos. Hablaremos especialmente en relación a las obras literarias.

¿A quién se considera autor de una obra literaria?

Alguien que da origen a un texto es el autor de la obra. Es posible que la obra haya sido creada entre más de una persona; en ese caso, decimos que hubo coautoría entre dos o más autores. Los coautores pueden definir entre sí la extensión de sus derechos, pero por regla todos tienen derechos idénticos.

¿Qué es necesario para obtener la protección del derecho de autor?

Al escribir su producción literaria y publicar un libro, revista, por Internet o cualquier otro medio, el autor ya obtiene derechos autorales. Eso sucede porque los derechos de autor de una obra literaria no dependen de ningún tipo de registro. Lo que sí se debe demostrar es la originalidad (condición sine qua non) y la anterioridad.

¿Qué protege el derecho de autor?

La legislación que protege los derechos autorales es ligeramente diferente en cada país, pero se pude decir de manera general que la ley protege dos tipos de derechos: los derechos morales, que son los relacionados al aspecto personal del autor; y los derechos patrimoniales, los relacionados a resultados tangibles, como la ganancia, por ejemplo.

¿Qué son los derechos morales y los derechos patrimoniales de autor?

Son parte de los derechos morales, los relacionados a la personalidad. Como ejemplo citamos el derecho que tiene el autor de que su nombre esté asociado a la obra o también a mantener la obra inédita. Los derechos morales no pueden ser transferidos a otra persona. Los derechos patrimoniales están relacionados a la posibilidad de explotar económicamente la obra, lo que podemos resumir como el derecho de utilizar, gozar y disponer de las ganancias.

¿En qué consiste el derecho de reproducción?

Reproducir una obra literaria es literalmente el hecho de producir copias, aunque sea parcialmente. El derecho de reproducción pertenece exclusivamente al autor. La ley permite que transfiera a otro ese derecho, aunque de manera temporaria. Es importante destacar que la reproducción sin autorización del autor es una acción ilegal y, en muchos países, es considerada un crimen.

¿En qué consiste el derecho de transformación?

Así como el derecho de reproducción, el derecho de transformación pertenece exclusivamente al autor, pero puede ser transferido a otra persona. Ejemplos clásicos de transformación de obra literaria son la traducción, la reorganización o la adaptación. El resultado de la transformación es una obra literaria derivada que tiene la misma protección original.

¿Qué son las limitaciones y excepciones al derecho de autor?

Son usos de la obra original sin el consentimiento del autor, pero que no pueden ser considerados violación de derechos. Por ejemplo la reproducción parcial para fines académicos, la citación de porciones en otras obras, las paráfrasis, entre otras.

¿Cómo trabajan las casas publicadoras adventistas para proteger los derechos de autor?

Puedo citar dos maneras principales, que llamaré prevención y corrección. En el área de la prevención, las casas publicadoras se certifican que la obra literaria (1) es original y (2) los derechos materiales del autor fueron correctamente asegurados. Pero, cuando surge una denuncia de violación de los derechos autorales por parte de terceros, las casas publicadoras buscan la corrección por medio de medidas judiciales.

En pocas palabras, ¿ se refiere la Biblia a los derechos de autor?

Sí. En 2 Pedro 1:20-21 el apóstol da crédito al Espíritu Santo como el autor de la inspiración profética. Este es un pasaje que demuestra la preocupación del apóstol en atribuir correctamente la autoría. En otro texto vemos que Jesús responde a la tentación de Satanás diciendo: “Escrito está…”, lo que para mí es una indicación de que Cristo mismo proveyó referencias en cuanto a sus citas. Además, es bastante evidente la orden para que nadie se apropie de lo que no le pertenece, orden que a mi modo de ver, incluye bienes intangibles, como las ideas.