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Comunicación

Una historia de fe en busca de la verdad

Un hombre no se sentía conforme con las creencias que tenía. Decidió salir a buscar paz en su corazón y encontró una verdad que cambió su vida y la de su familia.


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Hace más de 30 años que Osvaldo Lucero fue miembro de la Iglesia Adventista de la Reforma en San Juan. Llegó a ser Pastor de la denominación, y estuvo a cargo de una congregación.
Hace 10 años, comenzó a sentirse no muy cómodo con las críticas que se tenían hacia la iglesia de la cual había surgido el movimiento.

Bautismo de Osvaldo Lucero junto al Pr. Carlos Gill

Bautismo de Osvaldo Lucero junto al Pr. Carlos Gill

Esa vida de cristianismo que profesaba, teniendo diferencias con los dirigentes de la organización, lo llevaron a tomar la decisión de finalmente apartarse y formar su propio grupo, al que llamó "Iglesia Adventista del 7° Día".
Osvaldo, aún sentía que faltaba algo en su vida, no tenía paz, es así como entró en contacto con un pastor adventista.  Sus dos hijas fueron a estudiar a la Universidad Adventista del Plata y cuando fue a visitarlas, se encontró con un estudiante de teología en la Universidad Adventista del Plata, A. Gabriel Pequero (ex miembro reformista) y éste a su vez se contacta con el Presidente de la Misión Argentina del Centro Oeste, el Pr. Horacio Rizzo, y marcaron una visita en San Juan.

El Pr. Carlos Fernández  (quien atiende actualmente un grupo de iglesias en San Juan) junto con el Pr. Horacio Rizzo, visitaron a Osvaldo. En la charla que tuvieron, Osvaldo expresó su firme decisión de volver a la Iglesia. También sintió que el grupo que estaba dirigiendo tendría que acompañarlo en esta importante decisión.  El cuenta con una radio en su casa y decidió ponerla al servicio de Dios.
El sábado 19 de noviembre, fue bautizado por el Pr. Carlos Gill, en el marco de la inauguración de la fachada del templo de la Iglesia Adventista de San Juan.

Osvaldo siente que necesita compartir lo que descubrió: El mensaje de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.  Esa es la misión que tenemos cada uno de nosotros.