¿Niños contaminados?
Debemos estar alertas. El hecho de no estar inclinándonos ante una estatua visible, de bronce, no significa que estamos libres de peligro de prestar adoración a un dios falso.
No permita que las flechas que indican el camino sean invertidas
El día 25 de julio de 2015, en una ceremonia privada, fue inaugurado un monumento en Detroit, en el estado de Michigan (EE.UU.), que impactó a mucha gente. Después de haberse anunciado en enero de este año el proyecto de la estatua, el Templo Satánico cumplió la promesa. Se trata de la imagen de Bafomet, un ídolo pagano, cuyo cuerpo es de hombre, pero la cabeza y las patas son de buey, con barba y cuernos. Entre los detalles esculpidos en la estatua de bronce se puede ver el pentagrama en la frente, además de otros símbolos relacionados al ocultismo, la brujería, la mitología y el satanismo.
De acuerdo con los idealizadores del proyecto, la intención es que esa estatua sea trasladada a Oklahoma y colocada frente al monumento de los Diez Mandamientos, como una forma de protesta para que las personas tengan la libertad y el derecho de elegir a quien desean adorar. En la opinión de ellos, el Estado no debe interferir ni manifestar preferencias legales con respecto a la religión.
No quiero usar este espacio para dar más publicidad a ese monumento ni discutir por qué las personas eligen deliberadamente adorar a Satanás. La libertad es uno de los regalos de Dios, y somos responsables de nuestras elecciones. Pero me gustaría llamar la atención a un detalle del monumento en cuestión.
Niños
Frente al ídolo están dos niños, un niño y una niña, también esculpidos en bronce, en posición de contemplación y admiración. La explicación que dio el portavoz del Templo Satánico, Lucien Greaves (quien antes respondía al nombre de Doug Mesner), fue la siguiente: “Esperamos que los niños vean nuestra estatua como un bella obra de arte, no hay nada que temer”. Y completó su explicación diciendo que no están adoctrinando a los niños, si ellos no han sido “contaminados con la propaganda negativa” no se asustarán con la imagen. Lucien también enfatizó la “finalidad funcional” de la estatua, al proveer un lugar donde “las personas de todas las edades podrán sentarse en el regazo de Satanás para la inspiración y contemplación”.
¿Qué es eso? ¿Promover algo de esa naturaleza ya no es un tipo de adoctrinamiento? Observe el verdadero mensaje por detrás de su defensa. “Si ellas no han sido contaminadas por la propaganda negativa…” O sea, si ellos no recibieron la orientación correcta sobre quién representa aquella figura, no necesitan sentir miedo. ¿Se percibe dónde está la distorsión?
La cuestión es la adoración
¿Sabía usted que una de las banderas que defiende este grupo es que el conocimiento lleva a la sabiduría? ¿Y que uno de sus siete principios es que “el espíritu de compasión, sabiduría y justicia debe prevalecer siempre sobre la palabra escrita o hablada”? Tanto que ellos no tienen reparos en afirmar que el objetivo de ese monumento es servir “como un farol que pide compasión y empatía entre todas las criaturas vivas”. Pero, ¿cómo quieren ellos implantar esos conceptos? ¿Confrontando y atacando la Ley de Dios? No se olvide de que la Ley de Dios es un reflejo de su carácter.
Porque desea recibir la adoración que le pertenece a Dios, la estrategia del enemigo continúa siendo atribuirle a él sus propias características malignas y reivindicar para sí las características del Creador.
Debemos estar alertas. El hecho de no estar inclinándonos ante una estatua visible, de bronce, no significa que estamos libres de peligro de prestar adoración a un dios falso.
El mensaje de Elías
La escritora Elena de White menciona el significado especial que tiene la historia de Elías para nosotros hoy. Vea su declaración: “Vivimos en una era de idolatría similar a la que vivió Elías. Aunque no haya ningún altar visible ante los ojos, miles están siguiendo a los dioses de este mundo […] Muchos, aún entre los que se dicen cristianos, siguieron influencias que son totalmente contrarias a Dios y su verdad. […] Vemos un espíritu de idolatría y sabiduría humanas y una disposición a colocarse sobre la revelación divina. Las personas parecen haber perdido la capacidad de identificar la diferencia entre la luz y las tinieblas, la verdad y el error. Creen que las opiniones de unos pocos que se dicen filósofos son más confiables que las verdades de la Biblia. […] Dios estableció flechas indicadoras para orientar a los viajeros de este mundo. La flecha de la obediencia voluntaria al Creador señala el camino a la vida, mientras que la flecha de la desobediencia indica el camino a la muerte. Mientras tanto, para desgracia de nuestra raza, el gran enemigo del bien invirtió la posición de las flechas indicadoras y las multitudes fueron engañadas para seguir el camino equivocado” (Os Ungidos [nova versão de Profetas e Reis, em preparo], p. 80, 81).
Una estrategia está en desarrollo para disminuir la importancia de la ley de Dios y no me estoy refiriendo solo al desprecio manifestado por un grupo que se coloca abiertamente del lado del adversario. Si no hicimos nuestra parte en la obra de restauración de la verdadera imagen del Creador entre los niños, adolescentes y jóvenes, ahí sí serán “contaminados” con el fruto prohibido de la desconfianza ofrecido en varias versiones diferentes.
La Biblia nos alerta y nos llama a despertar: “He aquí, yo os envío el profeta Elías, antes que venga el día de Jehová, grande y terrible. El hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres, no sea que yo venga y hiera la tierra con maldición” (Mal. 4:5,6).
Esa obra de reforma y restauración necesita comenzar ahora, para que las flechas continúen señalando a aquel que es el Camino, la Verdad y la Vida, el único que merece nuestra adoración.
Para que las flechas indicadoras sean visibles:
- Lea Éxodo 20:1-20. Preste atención al mensaje positivo de la Ley de Dios. Los Diez Mandamientos no son un conjunto de reglas que nos privan de nuestra libertad. Ofrecen seguridad. Los límites existen para protegernos del peligro.
- El libro Patriarcas y Profetas, en el capítulo 29, presenta la razón del odio de Satanás a la ley de Dios y revela sus estrategias al atacar a cada uno de los mandamientos. Esa es una lectura importante para comprender por qué la ley está en el centro de la cuestión. El texto también está disponible en Internet. Basta investigar en https://egwwritings.org/. La Casa Publicadora Brasileña lanzó una versión en el lenguaje actual de ese libro, con el título Os Escolhidos, para acompañar la guía de estudios de los adolescentes. Está disponible en https://www.cpb.com.br/.
- La mentira no resiste a la verdad. Y la verdad está en la Palabra de Dios. Dedique tiempo con su familia a leer diariamente la Biblia. Una sugerencia excelente es seguir el programa de estudios “Reavivados por su Palabra” (http://www.revivalandreformation.org/). Otra opción es escuchar la lectura de la Biblia por medio de la aplicación YouVersion.