Escuela Cristiana de Vacaciones cambia vidas en el Norte del Perú
Miles de niños en el norte del Perú se beneficiaron de la Escuela Cristiana de Vacaciones denominada "Vida Salvaje"
Lima, Perú… [ASN] Del 19 al 28 de febrero, se llevó a cabo la Escuela Cristiana de Vacaciones (ECV), organizada por la Iglesia Adventista del Séptimo Día en el norte del Perú, bajo el lema: “Vida Salvaje”. Esta actividad es organizada por el Ministerio de la Mujer con el único fin de educar con principios y valores cristianos a los niños de la iglesia y la comunidad. Cada año, la temática de esta actividad varía, y para este año 2015 se basó en la vida salvaje, conociendo en el segmento denominado “Safari” a diferentes animales de la selva, asimismo se desarrollaron historias de personajes de la Biblia y diversas actividades sociales.
Los niños que participaron de la ECV se desarrollaron en diferentes áreas como el aspecto social, creativo y espiritual. La programación derivó en momentos de recreación, manualidades y estudio de la Biblia. Una de las maestras nos contó su experiencia: “Es la primera vez que soy maestra, personalmente dejé mi trabajo para ayudar en la Escuela Cristiana, pero no estoy arrepentida, sabía desde el primer momento que sería una experiencia inolvidable, y gracias a Dios en nuestra escuela atendimos a 25 niños. Afirmó, Jessebel García, maestra de la ECV realizada en Huachipa – Lima.
Asimismo, en la ciudad de Chiclayo, encontramos el testimonio de Marita Rufino, una adolescente no adventista que al enterarse de los objetivos de la Escuela Cristiana de Vacaciones, mostró mucho interés en este evento. Aunque estaba delicada de salud y no podía participar de los ensayos, buscaba en internet las coreografías de los cantos y se las memorizaba. Tampoco quiso quedarse atrás con las invitaciones y salió a las calles a invitar a los niños, consiguiendo que tres de sus primos participen del evento.
Al iniciar la ECV, Marita atendió a cada niño con mucho cariño, y desarrollaba las actividades con mucha responsabilidad. Uno de esos días Marita tenía una cita con el médico, y estaba angustiada porque podría cruzarse con la ECV, por ello en oración le pidió a Dios que no fuera así, y Él respondió. Ahora Marita está fortalecida en la fe y viene desarrollando el estudio de la Lección “Yo Creo”, y pronto entregará su vida a Cristo.
Así como con Marita, la Escuela Cristiana de Vacaciones no sólo cambia la vida de los niños, sino también de las maestras que se comprometen voluntariamente a desarrollar esta actividad, la misma que tiene frutos eternos, porque la Biblia dice: “Instruye al niño y aún cuando fuere viejo, no se apartara de el”. [Equipo ASN, Jaime Vilcapoma]