Papá Noel, Santa Claus y San Nicolás son algunos nombres con los cuales se le conoce universalmente al personaje legendario que según la cultura occidental trae regalos a los niños el 25 de diciembre.
Pero, ¿quién es este personaje? Se dice que fue un obispo cristiano de origen griego, que nació cerca del año 280, en la actual Turquía, y sus restos están en la basílica San Nicolás de Bari, Italia. Se convirtió en una persona muy venerada por los cristianos de la Edad Media.

Dado a que la historia va cambiando, ¿cómo se llegó a relacionar este personaje con los regalos de Navidad? En la antigua Roma se realizaban fiestas- a mediados de diciembre- en honor al planeta Saturno- fiesta pagana, en la cual los niños recibían obsequios de los adultos.

En otra época posterior, cuando el mito de San Nicolás aún no se había concretado, existían otras tradiciones como la de niños italianos que recibían regalos de un hada o bruja de nombre Befana. Más adelante vendría el viejito bonachón.

¿Pero cómo se trasformó de San Nicolás a Santa Claus o Papa Noel?

Inmigrantes holandeses, en 1624, que llegaron a tierras norteamericanas (New York) llevaron sus mitos, entre ellos a Sinterklaas, su ídolo. Cuya fiesta en honor al mismo se celebra en Holanda entre el 5 y 6 de diciembre. Pero la historia no queda allí. El escritor Washington Irving, en 1809, escribió una sátira, en la que transformó a Sinterklaas, en Santa Claus.

Más tarde el poeta Clement Clarke Moore, en 1823, publicó un poema donde dio cuerpo al actual mito de Santa Claus. En el poema se hace mención de una versión de Santa Claus, enana y delgada, como un duende; pero que regala juguetes a los niños en víspera de Navidad y que se transporta en un trineo tirado por nueve renos, incluyendo a Rudolph (Rodolfo).

¿Qué tiene que ver Coca Cola con Papa Noel?

Muchos creen que la famosa bebida gaseosa tuvo mucho que ver en la vestimenta del personaje, ya que en el siglo XX la empresa encargó a un pintor que remodelara la figura de Santa Claus para hacerlo más humano y creíble. Yo me atrevería a decir comercial. Insinuando el consumismo desmedido y la intemperancia, que atenta contra el cuerpo que es templo del Espíritu Santo.

Navidad mágica ¿Debe un cristiano creer y practicar la magia?

Si usted dice ser seguidor de Jesús, ¿por qué cree en la magia? Talvez su respuesta sea no, no creo. Entonces ¿por qué fomenta el personaje de Papa Noel, a los duendes y a los renos, figuras paganas, en la mente de sus hijos? “Inocentemente” puede estarlos llevando al lado de Santa para tomarse una fotografía o insinuando que sus hijos recibirán regalos de Santa la noche del 25.

Recuerde que Santa Claus no hizo nada por usted, ni por los suyos. Jesús lo hizo todo. Dejó su gloria y majestad y se humilló para venir a este mundo a morir por usted y por los que ama. No tiene lógica reemplazar a Jesús por un personaje usado por el mismo Satanás para sacar la atención del personaje principal, Jesús.

Y como si eso no bastase, millones aplauden el trabajo de los duendes (personajes sobrenaturales originados en fantasmas de naturaleza maliciosa) que “fabrican” los regalos para sus hijos. Con todo respeto, ¡cuánto desconocimiento e insensatez hay en el mundo!

Creo que es tiempo de parar y reflexionar.

Sabemos que Jesús no nació un 25 de diciembre, pero muchos aprovechan las festividades para predicar de nuestra única esperanza, Cristo.

Un recado

Cuando vea a otros celebrando la Navidad al estilo pagano, evite la crítica, porque todos nos equivocamos y nadie es perfecto. Reemplace la crítica por la oración. Con seguridad el mejor remedio para el alma que traerá paz a su corazón estas fechas será ese.

Tal vez para muchos sea difícil dejar estas tradiciones porque se creció con esos mitos, pero pida ayuda a Dios quien le dará sabiduría para encaminar a su familia y enfocarse en lo que es correcto.

Que en esta Navidad Jesús nazca en su corazón y se convierta en su héroe. ¡Feliz Navidad!