Trujillo, Perú… [ASN] El trabajo misionero de los Amigos de Esperanza ya está dando resultados. César Castañeda, un pintor de vocación, fue invitado a participar en una iglesia adventista de una forma muy particular. El día de su cumpleaños, semanas previas a la campaña de Semana Santa, estaba atravesando por problemas económicos y toda esta carga le generaba una enorme tristeza; ese mismo día encontró en la calle a Donaldo Alburquerque, miembro de la iglesia adventista. César no conocía muy bien a Donaldo y se atrevió a cuestionarle sobre su religión y, Donaldo, mirándolo triste y enterándose de sus problemas no dudo en invitarlo a participar, en la iglesia, sabiendo que en esta encontraría paz y tranquilidad para su corazón.

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Donaldo, dirigente de la iglesia adventista “Las Quintanas” en Trujillo - Perú, recordó que el templo requería ser pintado y fue así que decidió dar esta responsabilidad a César, quien gustosamente aceptó. Durante los días que duró la obra César se sintió a gusto pintando el templo junto a su amigo de esperanza (Donaldo); asimismo aceptó recibir estudios bíblicos. “Justamente ya por terminar los estudios bíblicos, el pastor de la iglesia, Santos Corrales, me interrogó: "¿A ti te gustaría bautizarte?", le dije: Claro pastor, voy a bautizarme porque he visto que la solución está en Cristo. Entonces él me dijo: "¡Bien César!". Fue así que fui bautizado el sábado 12 de abril, el día de los Amigos de Esperanza”, afirmó César.

César, manifiesta que, tenía una vida difícil donde las peleas y las borracheras eran el día a día después del trabajo; lo mismo que le traía problemas en casa. Luego que entregó su vida a Cristo tiene palabras de gratitud hacia su amigo de esperanza. “Gracias Donaldo, por tu apoyo espiritual, porque a veces yo me sentía desmayado por el trabajo, rendido y cuando estaba con él estábamos alegres estudiando la biblia. Doy gracias a Dios que estoy acá en la iglesia y he entregado mi vida a Cristo”, palabras expresadas a Donaldo.

Donaldo, por su parte, asevera lo siguiente: “Doy gracias a mi Dios por darme el valor de hablarle en un momento tan difícil a César, en momentos de aflicción. Incluso en el día de su cumpleaños entendí que este era el plan de Dios. Lo invité a hacer el trabajo de pintura y lo hicimos, ahora el está en la iglesia sirviendo a Dios, y tenemos planes de dar juntos los estudios bíblicos. Por todo ello doy gracias a mi Dios”.[Equipo ASN, Jaime Vilcapoma]

 

Vea el testimonio de César Castañeda en el siguiente video: