Quito, Ecuador... [ASN] Amanecía al igual que en aquel 22 de Octubre de 1844, y en la Misión Ecuatoriana del Norte en la ciudad de Quito, el personal administrativo y de oficina alistaba los preparativos para conmemorar, lo que hace 170 años atrás se conoció como El Gran Chasco, un suceso que marcó la vida de miles de cristianos en Estados Unidos de América y el mundo.

Con varias representaciones alusivas a los cristianos de la época (muchos de los cuales serían los primeros Adventistas del Séptimo Día) y una reseña de la historia que marcó aquel 22 de Octubre, el personal de la institución resaltó el valor que este suceso, tiene para la iglesia y sus miembros.

El tema central fue compartido por el Presidente del campo misionero, Pr. Freddy Guerrero; quien manifestó que El Gran Chasco, es un momento especial en el cumplimiento de la profecía bíblica, del cual nunca debemos olvidarnos: “El Gran Chasco fue el momento en el cual Jesucristo pasó del Lugar Santo al Lugar Santísimo en el Santuario Celestial, y ello refuerza nuestra fe en el trabajo de intercesión que está haciendo por cada uno de nosotros actualmente. Por eso es necesario que antes del cumplimiento de Su Venida, nosotros proclamemos al mundo Su Mensaje para que otros más puedan conocer La Verdad”, manifestó el Pr. Guerrero.

 Indicó de igual manera que debemos orar al Señor pidiendo el derramamiento de Su Espíritu en estos tiempos finales, para que la iglesia y sus miembros se mantengan firmes a pesar de las pruebas y ataques que vendrán en contra de ella. “La iglesia puede estar segura que no pasará otro chasco similar o mayor como el que pasaron nuestros pioneros en 1844. Jesús no ha olvidado Su Promesa de volver a la tierra por Segunda Vez a salvarnos, podemos estar seguros y convencidos de Su Palabra discipulando a otros e invitándolos a que también formen parte del Pueblo de Dios”, agregó al final de su intervención.

Luego del 22 de Octubre de 1844, Dios permitió que aquellos cristianos fieles que habían esperado su venida en aquella fecha señalada, entendieron por visión de Dios lo que en realidad significaba ese día dentro de la profecía bíblica. Al hacerlo, retomaron con la misma pasión la predicación del Evangelio, llevando a la humanidad el mensaje del Advenimiento, aquel Mensaje de los Tres Ángeles del cual nos habla el libro de Apocalipsis.

De ahí en adelante: libros, revistas, medios de comunicación, instituciones, misioneros y feligresía; han sido parte de esta misión que busca transmitir al mundo el Mensaje Adventista que por la Gracia del Señor, hoy se encuentra en 200 de los 208 países reconocidos en todo el planeta tierra. Una muestra más de cómo en estos 170 años se ha diseminado el Mensaje en cumplimiento de la Palabra de Jesucristo: “Y será predicado este Evangelio del Reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin” Mateo 24:14. [Equipo ASN, Vanessa Castro y Marcho Chile]