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La ruptura de la Unión Europea y la profecía de Daniel 2

¿Cuál es la relación entre la profecía del libro de Daniel y el reciente anuncio de la salida del Reino Unido de la Unión Europea? Respodemos en este artículo.


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ruptura-de-la-union-europeaEl Reino Unido decidió en referendo, por más de 1,2 millón de votos de diferencia, retirarse la Unión Europea (UE). El resultado de la consulta fue divulgado en la madrugada del viernes 24 de junio.

La Unión Europea fue creada oficialmente el 7 de febrero de 1992, en Europa, pero su origen es mucho más antiguo y está íntimamente relacionado con los procesos anteriores de creación de un gran bloque económico europeo. Ese bloque surgió de la unión de los países que formaban parte de Benelux, que era un pequeño bloque formado por Bélgica, Holanda y Luxemburgo, con la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA), que lo formaban Alemania, Italia y Francia. Después de la unión de esos dos bloques, otros países se juntaron y formaron parte de lo que se transformó en el Mercado Común Europeo a través del Tratado de Roma, que se firmó en 1957.
La noticia de que el Reino Unido dejaría de ser parte de la UE causó una conmoción de comentarios, preguntas y reflexiones relacionadas a la profecía de Daniel 2. ¿Será ese hecho un cumplimiento profético? Antes de responder creo que una visión general del capítulo nos ayuda a entender mejor y a formar una posición equilibrada de la profecía, dejando cualquier especulación o alarmismo.

El contexto de Daniel 2

El capítulo narra el momento cuando Dios le dio a Nabucodonosor un sueño. Había un mensaje especial de parte de Dios para el rey sobre la historia del mundo y que por extensión llegaría hasta los últimos días. Al despertarse, Nabucodonosor no recordaba los detalles de su sueño, pero sabía que ese sueño tenía cierta importancia.
Hasta el versículo 3 del capítulo 2, el idioma en el cual estaba escrito era el hebreo. A partir del versículo 4, el texto está en arameo. Daniel escribió directamente a las naciones vecinas de Israel, que no hablaban el hebreo.

Al despertarse, el rey les pidió a los sabios de Babilonia que le dijeran cuál había sido su sueño y su significado. Los sabios de Babilonia no tenían cómo responder eso al rey. Ellos intentaron ganar tiempo, pues se dieron cuenta de que la situación se complicaría, porque Nabucodonosor hablaba en serio. Es evidente que los pretendidos poderes humanos de adivinación, previsión, astrología, en realidad no existen. Dios actúa donde la sabiduría humana no actúa. Dios hace lo que ningún hombre puede hacer; y solo él es quien conoce el futuro.

Daniel no sabía lo que estaba sucediendo hasta que Arioc le informó sobre el decreto de muerte, que lo afectaría por ser un sabio y él también tendría que morir. Daniel demostró calma en el momento de aflicción, pues confiaba en Dios y sabía que el Señor dirigía su vida y no necesitaba desesperarse.
El rey convocó a los sabios de las categorías más altas y Daniel y sus amigos, aun siendo considerados los más sabios en el capítulo 1, no estaban entre los llamados. Cuando supo del decreto, Daniel le pidió al rey un plazo.

Lo que más había enfurecido al rey fue la demora de los sabios en darle una respuesta. Daniel se presenta con humildad y sencillez ante el rey. Su pedido fue diferente. Los caldeos pidieron que el rey les dijera el sueño y ellos lo interpretarían. Daniel pidió única y exclusivamente tiempo, y el rey se lo concedió.
Daniel volvió a su casa y les contó a sus amigos lo que pasaba y pidió que también oraran a Dios por la solución del misterio. El Señor es el único que puede solucionar las situaciones imposibles. Dios le mostró a Daniel el sueño y su interpretación.

El profeta fue al encuentro del rey y antes de comenzar a interpretar el sueño, hizo que el rey dirija su mente hacia Dios. Daniel dio testimonio del Señor y de su poder antes de comenzar a solucionar el problema. El sueño presentaba una estatua con diferentes metales. La cabeza era de oro, los brazos y el pecho de plata, el vientre de bronce, las piernas de hierro y los pies en parte de barro y en parte de hierro.

Cada metal representaba un reino diferente conforme a la interpretación de Daniel. El rey de Babilonia era la cabeza de oro, elemento abundante en la tierra de Babilonia. Los reinos que suceden están representados por elementos y partes del cuerpo en la estatua que se encajan por completo en la historia. Daniel predijo eventos muchos años antes de que sucedieran. Los eventos del capítulo 2 sucedieron en el año 603 a.C.

Por la Biblia vemos una historia que siempre estuvo marcada por la intervención de Dios para llegar hasta su plan final, que es la consumación de la historia de la redención. Una pregunta que siempre aparece es cómo se relaciona esto con el libre albedrío que Dios les dio a los seres humanos.

Lo que tenemos en verdad es un libre albedrío condicionado. Aunque los seres humanos son libres, dentro de él existen límites. Cada vez que el libre albedrío del hombre comienza a interferir los planes de Dios, él actúa redirigiendo la historia. Al crear el mundo Dios tenía un plan para toda la humanidad, una historia lineal. El hombre se desvió de la ruta propuesta en el principio. Dios respeta ese desvío, pero respeta hasta cierto límite, cuando no tiene influencia en el propósito final. En otras palabras la historia no está abandonada por sí sola, Dios está controlando todo.

Las naciones de la estatua marcan los imperios de dimensiones mundiales. Esos cuatro imperios mundiales y el imperio dividido representado por los pies en parte de hierro y en parte de barro presentados por Daniel tuvieron su período de tiempo de actuación en el gobierno, todos comprobados por la historia.
Partes de la estatua Imperios y períodos
Cabeza de oro Babilonia – 605 a 539 a.C.
Pecho y brazos de plata Medos y persas – 539 a 331 a.C.
Vientre y muslos de bronce Grecia – 331 – 168 a.C.
Piernas de hierro Roma – 168 a.C. a 476 d.C.
Pies de hierro y barro División de Roma que va desde 476 d.C. hasta el regreso de Cristo que marcará el final de la historia del mundo.

 

El versículo 41 de Daniel 2 presenta el último imperio, representado por los pies como un reino dividido. La historia nos muestra que después del imperio romano, el último imperio humano de alcance mundial, surgió una división del imperio en diez partes, que son representados por los diez dedos de los pies de la estatua.

Los diez reinos resultantes de la división fueron:
Francos
Alamares
Anglos
Lombardos
Visigodos
Suevos
Burgundios
Hérulos
Vándalos
Ostrogodos
Aplicación final de la interpretación profética

El hierro y el barro definen que algunos reinos serían fuertes y otros débiles. Como por ejemplo, la fuerza militar que poseían los francos y visigodos. El factor que llama más la atención está en el hecho de que el hierro y el barro no se mezclan. Esa profecía fue contundente; después del cuarto imperio, los países europeos intentarían reunificarse para formar un nuevo imperio, pero no se unirían más. Existieron varios intentos de una unificación, pero todos sin éxito. Entre ellos están:

Carlomagno: siglo VIII.
Carlos V: siglo XVI.
Napoleón Bonaparte: siglo XIX.
Kaiser Guillermo II y Hitler en el siglo XX.

Todos los intentos fallidos muestran que la profecía tenía razón; todos se frustraron porque no se logró una unificación. El barro aparece siempre como elemento central, lo que da la idea de la fragilidad de los imperios humanos. La Unión Europea, debilitada por la posible salida del Reino Unido, es solo la continuidad de la profecía que afirma que el hierro y el barro no se mezclan. No hay ningún elemento nuevo, sino la fuerza de la revelación bíblica confirmada en el transcurso de los siglos.
La profecía termina con una piedra que destruye toda la estatua. Representa el reino de Cristo que será un reino eterno. Se establecerá para siempre y todo el mundo estará unido. Sí, habrá un imperio mundial, ya no controlado por hombres, sino ahora regido por Dios mismo. La piedra que destruyó la estatua y fue creciendo hasta abarcar todo el mundo es el regreso de Jesucristo.

Mira el comentario del pastor Jorge Rampogna sobre el tema:

Rafael Rossi

Rafael Rossi

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Hechos diarios desde un punto vista teológico

Graduado en Teología y posgraduado en Aconselhamento y con maestría en Teología pastoral. Actualmente es el director de Comunicación en la Sede de la Iglesia Adventista del Séptimo día para ocho países sudamericanos. @rafaelrossi7