Más de dos mil delegados de todos los continentes tendrán varios momentos para discutir y decidir los rumbos de la Iglesia.

Brasilia, Brasil... [ASN] Cada cinco años se realiza el Congreso Mundial de la Iglesia Adventista del Séptimo Día para expresar gratitud a Dios por los avances que la organización ha hecho en el planeta, pero, también, para aprobar documentos, declaraciones e incluso hacer modificaciones en las creencias fundamentales y reglamentos como es el caso del Manual de la Iglesia.

Durante los días 2 al 11 de julio, en San Antonio, Estados Unidos, los más de dos mil delegados de todos los continentes tendrán varios momentos para discutir y decidir los rumbos de la Iglesia. Este año, se prevén alteraciones en las llamadas Creencias Fundamentales y en el Manual de la Iglesia.

Los adventistas del séptimo día aceptan la Biblia como su único credo y mantienen 28 creencias fundamentales que guían los principios de la organización. Estas creencias constituyen la comprensión y la expresión de la enseñanza de la Biblia por parte de la Iglesia. Y solo puede haber alteraciones en estas declaraciones en una asamblea mundial. El pastor Ted Wilson, presidente mundial de la Iglesia, declaró durante una reunión administrativa del año pasado que “apenas estamos ajustando el texto de modo que resulte más claro y útil”.

Y, en la práctica, es lo que deberá ocurrir. Deben realizarse apenas cambios para esclarecer puntos de las creencias en los cuales surgen dudas a lo largo de los años, sustitución de términos o palabras que no tengan más sentido en el lenguaje de hoy e inclusión de algunos enfoques como en las creencias sobre Jesús, el Espíritu Santo, el casamiento y la familia, la creación, entre otras.

Manual de la Iglesia

Otro documento que solo puede ser modificado en un congreso como este es el Manual de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. La historia de este material es antigua. El Congreso de la Asociación General de 1882 votó la preparación de instrucciones a los oficiales de la Iglesia para imprimir en la Review and Herald en forma de folleto en aquella época. Al año siguiente se propuso que esos artículos tomasen forma permanente por medio de un manual. “Es un documento, inclusive, con valor legal ante la justicia”, agrega el director jurídico de la Iglesia para ocho países sudamericanos, Dr. Luigi Braga.

Para el Congreso de este año, se prevén alteraciones de redacción en los capítulos que tratan, por ejemplo, sobre la autoridad de la Asociación General de la Iglesia, la disciplina eclesiástica, además de las modificaciones en la estructura del departamento del Ministerio Joven con la creación del ministerio de apoyo que podrá ayudar inclusive a universitarios de una forma más específica. [Equipo ASN, Felipe Lemos]