El encuentro entre Elivando y Almira emocionó a todos. Del contacto virtual al momento personal: instructor e instruida quieren hacer más discípulos.

Brasilia, DF … [ASN] La sonrisa de Almira Stefanello Lopes lo decía todo. O prácticamente todo. Principalmente en el momento en que le dio un largo abrazo al joven Elivando Rodrigues Moreira, de 14 años, en Brasilia, en la sede adventista sudamericana.  Los dos se encontraron personalmente por primera vez este sábado 21, durante la Junta Directiva Plenaria, evento que reúne a los líderes de la organización de ocho países sudamericanos. El intercambio de miradas daba evidencias de gratitud. Almira vive en Jaciara, Mato Grosso, y viajó para su bautismo especial.

Almira fue bautizada por el pastor Luís Gonçalves, evangelista de la Iglesia Adventista, pero recibió los estudios bíblicos online por el motivado Elivando, bautizado hace solo un año. El joven, que vive en Ceará, demuestra una madurez espiritual impresionante y explicó a los presentes que desea ser pastor o un misionero de tiempo completo. Frente al público, le expresó al pastor Gonçalves que desea comprender mejor algunos aspectos de las profecías registradas en el libro de Apocalipsis. El evangelista rápidamente se reunió con él, después del momento del bautismo de Almira.

Elivando contó que actualmente estudia la Biblia con ocho personas y lo hace básicamente por medio de la “herramienta” de conversión online Whatsapp. Él conoció a Almira en un grupo de personas que escucha una radio online llamada Advento.  En ese ambiente virtual, Almira se desahogó sobre problemas personales hasta que mantuvo el contacto con este joven que, en ese entonces, comenzó a enviarle música cristiana y estudios bíblicos online directamente a ella.  “Este es un ejemplo de que las nuevas generaciones tienen un enorme potencial para llevar el mensaje de Dios”, afirmó el patsor Helder Roger Cavalcanti, uno de los vicepresidentes de la Iglesia para ocho países sudamericanos.

El encuentro entre Elivando y Almira emocionó a todos. Del contacto virtual al momento personal: instructor e instruida quieren hacer más discípulos.

El pastor Elbert Kuhn conversa con Ila quien detalla un poco de su trabajo en la alejada isla brasileña. 

La intención del programa del sábado por la mañana, en la Junta Directiva Plenaria, era mostrar evidencias de la gran importancia de esforzarse para apoyar iniciativas que motiven a jóvenes, niños y adolescentes en el evangelismo. Y quien pasó al frente habló con el objetivo de inspirar a los líderes.

Ese fue el caso de la abogada Ila Lúcia Gomes.  Ella y su amiga trabajan desde marzo de este año como voluntarias, dentro del proyecto Un Año en Misión, en la Isla del Bananal, en Tocantins, Brasil.  Ila resaltó que es una de las pocas personas de su familia con formación superior y que, por esta razón, había una gran expectativa luego de su graduación, incluso en relación con el apoyo en los gastos de la casa. Ella afirma haberle explicado con tacto a su familia que tenía el deseo de servir como misionera durante un tiempo. Algo que la sorprendió fue la reacción positiva de su abuela ante su decisión. “La vi más feliz cuando asistió a la ceremonia de consagración de los misioneros que cuando fue mi colación de grados” comparó.

Ella y su amiga continuarán hasta diciembre con el trabajo realizado junto a los indios carajás, en la Isla del Bananal.  La denominación adventista es la única cristiana en actividad constante en la región, según afirmaron las misioneras. [Staff ASN, Felipe Lemos]