Entrevista Fernando Navarro, científico.
Foto: Lisandro Batistutti

Buenos Aires, Argentina... [ASN] En Juan 4 se cuenta la historia de Jesús y la mujer samaritana. Ella fue al pozo a buscar agua, pero se encontró con una sorpresa: el Maestro de Galilea de ofreció algo mejor. En Juan 4:14 Jesús le dice que el agua de vida que él le dará saciará para siempre la sed.

Este mundo secular y posmoderno ofrece muchos tipos de “aguas”. Pero ninguna sacia de verdad el alma, como lo hace Dios. Esto pasó en la vida de Ricardo, y así lo cuenta el Dr. Fernando Navarro. “Tengo un consultorio y cuando las personas llegan allí les damos el libro misionero La gran esperanza. También hablo con las personas y, de acuerdo con las necesidades, las contactamos con los cursos de la iglesia y con el pastor Aníbal Espada. Yo al Pr. Espada lo llamo el pastor ambulancia. Siempre digo que una iglesia trabaja cuando su pastor trabaja. Aníbal es un pastor especial y estamos contentos. Cuando Ricardo llego a mi consultorio, le enseñe sobre los ocho remedios naturales. Llegamos al agua y me dijo qué me vas a enseñar a mí del agua, si soy experto en ese tema,  porque él hace una serie de filtros de agua que  sirven en la agroindustria en la parte ganadera y lo invite a la iglesia para que brinde una charla acerca del agua. El vino y se sintió a gusto, sintió el amor de Jesús y quiso empezar los estudios bíblicos. Pero el primer día me dijo: mira Fernando, que soy científico y soy ateo”

Pero Dios tenía un plan especial para Ricardo. Hoy, domingo 20 de octubre, se bautiza junto a su familia.

“Como haces esta tarea misionera”, concluye Fernando, “el más beneficiado es uno. Dios nos da la oportunidad y hay que usarla. Al hacer actividad misionera crece nuestra fe”.

[Equipo ASN, Pablo Ale - ACES]