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Comportamiento

¿Soledad?, Nunca más

Investigaciones muestran que la soledad puede llevar a padecer enfermedades cardiovasculares y cáncer. En este artículo sepa cómo salir de la soledad para no volver nunca más a ese estado.


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¿Estás deprimido porque te sientes solo? ¿Sientes que nadie se interesa en ti? ¿Lloras cada vez que la o las personas que amas no están allí para ti?, cuando te das cuenta que él o ella no tiene ningún interés en ti y eso te frustra. Entonces, ¡felicidades! Bienvenido (a) a la soledad común. Común, porque hay millones de personas como tú que están pasando lo mismo en este preciso instante mientras lees este artículo.

Los médicos dicen que la soledad no es buena para la salud mental porque tiene asociadas patologías como la depresión, ansiedad, estrés y falta de autoestima. Incluso, estudios muestran que la soledad puede causar enfermedades.

Una investigación presentada en la BBC dice que psicólogos de la Universidad de Chicago y de la Universidad Estatal de Ohio han demostrado que las personas que están socialmente aisladas desarrollan cambios en sus sistemas inmunológicos, que provocan una condición conocida como inflamación crónica.

Además el medio difundió que las inflamaciones temporales son necesarias para la cura de cortes o infecciones, pero si la inflamación persiste en el tiempo puede llevar a padecer enfermedades cardiovasculares y cáncer.

Experiencia

Por años y en varios momentos de mi vida pasé por momentos de soledad, y sé lo que es estar solo (a). Es a veces decepcionarte de algunas cosas hasta perder las ganas de vivir y llegarte a preguntar por qué estás en este mundo, qué propósito tiene tu vida. Aún más, le reclamas a Dios del por qué te sientes así y te desesperas mientras buscas otras formas de abandonar la soledad.

Los años no pasan en vano y en la vida te encuentras con personas que pasaron por eso y que ahora parece que se sientes felices a pesar de que están “solas” y te preguntas, ¿qué hacen ellas que no hago yo? Sí, eso me pasó el año pasado cuando le pregunté a una amiga si ella no se sentía sola a pesar de que estaba lejos de su familia y estaba entre comillas “sola”. Ella me dijo que comenzó a dedicar más tiempo a la oración y comenzó a involucrarse más en los proyectos de su iglesia. Decidí seguir su ejemplo, pero nada cambiaba. Hasta que…

Cierto día decidí experimentar por mí misma el secreto de no sentirse sola y, comencé a preguntarle a Dios en mi mente qué es lo que debía hacer. Pasé preguntándome lo mismo casi por tres meses y cuando pensaba desistir la clave apareció.

Una tarde antes de iniciar mis actividades fui a la sala de oración y tomé la Biblia que estaba del lado del mueble en una pequeña mesa, y leí sin planearlo el texto de Mateo 6:33: “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas”. Entonces, comencé a razonar con Dios hasta que juntos llegamos a la conclusión de que puedo estar rodeada de decenas de personas hablándome pero que estas no pueden llenar el vacío del corazón, el único que puede hacer ese milagro es Dios.

Listo, ¿por qué preguntar más?, la respuesta era obvia. Desde ese entonces comencé a pedirle a Dios que me complete, que llene el vacío de mi corazón y lo llene hasta que Él sobreabunde en mi vida, y que guarde mi corazón dentro del suyo para evitar cualquier peligro de ser lastimado. Así, si alguien quería tomar mi corazón debía pedírselo a Dios. Como verán lo aseguré bien y en el mejor lugar del universo. Desde aquel día mi vida no es más la misma. En ciertos momentos hasta extraño no sentirme sola- ironizando la idea-, entonces comprendo que no lo estoy, que Dios me ha completado.

El resultado es maravilloso, Dios te llega a llenar tanto que quieres llenar otros corazones con su presencia. No recomiendo buscar compañías de corta duración solo para salir del momento de soledad, porque para nada aprovecha, antes bien lastima. Tampoco no recomiendo gastar tu dinero en cosas superfluas, ¿para qué? Si Jesús puede llenar el vacío de tu corazón. Mi deseo es que tu oración diaria sea: “Señor complétame, para poder hacer feliz a alguien el día de hoy”. ¿Te gustó? Entonces pruébalo.

Por lo tanto, al escribir este artículo no invito a quedarse “solo” o “sola”, Dios tiene un plan hermoso para tu vida amigo (a) lector (a). Puedes practicar decirle a Dios que te complete mientras esperas y te preparas para aquella persona con la cual compartirás tu vida o mientras esperas regresar a la casa de tus seres queridos. Tú decides. Que Dios te bendiga en tu caminar.

 

 

Carolyn Azo

Carolyn Azo

Desafíos espirituales

Reflexione sobre las vicisitudes de la vida en su caminar diario con Dios y sepa que aún existe esperanza.

Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Peruana Unión, trabajó en el canal internacional 3ABN, en Estados Unidos, y en varias instituciones adventistas y en la sede Sudamericana de la Iglesia Adventista. @karolineramosa