Noticias Adventistas

Comportamiento

“Juego” del suicidio: Alerta para los padres y para personas digitales de influencia

Lo que padres de familia necesitan saber sobre los juegos de suicidio.


  • Compartir:

Foto: Shutterstock

Varias organizaciones que buscan la educación y seguridad en Internet están siguiendo con gran preocupación las noticias sobre un supuesto juego que incentiva la automutilación, suicidio y otras situaciones de riesgo entre los adolescentes en Internet. En los últimos días, relatos sobre la proliferación de grupos de WhatsApp  y en las redes sociales tuvieron gran repercusión con la cobertura de prensa y están causando pánico y preocupación en el país y la comunidad en general. Por ese motivo, decidimos compartir informaciones y recomendaciones de SaferNet.org.br que es una organización que defiende y promueve la seguridad y los derechos humanos en Internet.

Lea atentamente las orientaciones:

Al contrario de lo que muchos creen, ese “juego” no es un fenómeno nuevo y desconocido. Safernet de Bulgaria, por ejemplo,  apuntó como origen de los rumores una historia falsa (fake news) publicada en Rusia el 15 de marzo de 2016, y que afirmaba que 130 adolescentes rusos se habían suicidado después de participar del supuesto “juego” a través de una red social rusa.

En Brasil, la repercusión de esa noticia falsa, en tono alarmista, en las noticias de una emisora grande en la TV abierta, hizo que aumentaran las búsquedas en Google del supuesto juego en más del 1000%. En un error de enfoque, la historia mostró con detalles y de forma “didáctica” como se atrae en esas comunidades y cómo eran los “desafíos” para llegar al final del “juego”.

Mucho antes que existiera Internet comercial, el diario The New York Times publicó, en 1987, una historia sobre cómo el efecto contagio (o efecto Werther, que es un término científico por el cual la publicidad de un caso emblemático de suicidio sirve de estímulo a nuevos sucesos), generó nuevos casos de suicidio entre adolescentes y jóvenes en Estados Unidos. La historia está disponible en este link: http://www.nytimes.com/…/pattern-of-death-copycat-suicides-…

La Organización Mundial de la Salud (OMS) editó, en el 2000, un manual de prevención del suicidio con varias recomendaciones claras para el abordaje de los medios en caso que ocurran suicidios.  Lo que se espera del periodismo profesional  es que se comprueben las fuentes de información, se esclarezcan los hechos de forma responsable ante la población, que se evite el sensacionalismo y se enfoque en los cuidados y la prevención. Este manual está disponible en: http://apps.who.int/…/10665/67604/7/WHO_MNH_MBD_00.2_por.pdf

Con el poder de la diseminación y rápido alcance de la información, o la falta de ella, necesitamos actuar con cautela y responsabilidad para no provocar el pánico como el que estamos viendo en los últimos días en Brasil. Contenidos y foros online y grupos en aplicaciones de mensajería instantánea que incentivan la automutilación y el suicidio existen, en efecto, en Internet y siempre fueron reportados por muchos usuarios. En una investigación realizada por el Comité Gestor de Internet en Brasil, el 11% de los niños y adolescentes relataron haber tenido acceso a páginas que enseñaban formas de lastimarse y el 6% de cometer suicidio. Eso representa más de 2,5 millones de niños y adolescentes en Brasil. Esos datos son preocupantes, y es por eso que hacemos un llamado para que los medios de prensa y personas digitales de influencia inmersos en este debate público, tengan en consideración las recomendaciones de la OMS para la prevención del suicidio.

Sobre el fenómeno de la “ballena azul” es importante aclarar:

  • “Juego” no es el nombre más apropiado para nombrar al fenómeno. No se trata de una aplicación, programa de computadora, servicio o plataforma online a la que se pueda acceder. Las evidencias reunidas en Brasil indican la existencia de grupos en aplicaciones de mensajería instantánea y de comunidades y foros en redes sociales, que se hacen llamar como el nombre del juego, y que fueron creadas a partir de la repercusión, en Brasil, de la noticia falsa y alarmista originada en Rusia.
  • El nombre del “juego” ya se diseminó en Internet y no le faltan hashtags y páginas. Entre los grupos, se debe separar aquellos con individuos que están cometiendo el crimen de inducir, instigar o ayudar al suicidio de alguien, tipificado en el Art. 122 del Código Penal, de aquellas que fueron creadas como consecuencia de la onda expansiva y para “causar” o hacer trolling.
  • Si formas parte de los medios de prensa o eres una persona digital de influencia, debes saber que tu abordaje de las informaciones que trasmites interfieren con la proporción y propagación de este fenómeno en Brasil. Transmitir detalles, nombres, ejemplos, y otros recursos para llamar la atención y estimular la curiosidad, aunque mórbida, solo contribuye para el surgimiento de más páginas y contenidos oportunistas sobre el asunto.
  • Es precipitado establecer un nexo causal entre la existencia de un “juego” y que ocurran estos casos concretos de suicidio. Aunque hayan relatos de casos concretos de suicidio relacionados a alguna actividad de grupos y comunidades online, el suicidio es un fenómeno complejo, multifactorial, y de difícil simplificación y debe ser encarado como una cuestión de salud pública, y no solamente de seguridad pública.
  • La familia, la escuela, el poder público y la sociedad en general debe dar atención a los grupos más vulnerables de la población, sobre todo a los adolescentes con antecedentes de depresión, intentos de suicidio y otros sufrimientos psicológicos graves; no debemos jamás minimizar o subestimar lo que ellos dicen. Por eso, ante señales de angustia y sufrimiento, merece una conversación con un profesional, que sabrá indicar el tratamiento adecuado.
  • Prohibir el acceso a Internet de los hijos, confiscar el celular o monitorear el uso de aplicaciones a través de programas espías son medidas poco educativas y destinadas al fracaso. Ellas no previenen los riesgos y compromete el vínculo de confianza que debe existir entre los padres y los hijos. El intento de eliminar cualquier exposición a riesgos en espacios públicos como Internet es prácticamente imposible, y los padres y la escuela deben conversar de forma franca y abierta sobre cómo los adolescentes pueden lidiar y responder a esos riesgos. Es parte del desarrollo saludable, y preparación para la vida adulta, que el adolescente desarrolle habilidades para enfrentar los riesgos a su alrededor, eso se llama resiliencia, que solo puede desarrollarse enfrentando riesgos en un ambiente donde pueda pedir ayuda y con espacios para hablar sin prejuicios y reprimendas.

SaferNet ofrece un servicio gratuito de escucha, recepción y orientación especializada destinado a niños, adolescentes, padres y responsables que estén viviendo alguna situación de riesgo o violencia online. Un equipo de psicólogos está disponible desde las 14:00 hasta las 18:00 a través del chat o por correo electrónico; acceda: www.canaldeajuda.org.br

Otra opción de apoyo es el Centro de Valorización de Vida: http://cvv.org.br

Fuente: https://www.facebook.com/SafernetBR/posts/1317178101663414

 

Carlos Magalhães

Carlos Magalhães

Iglesia conectada

Como llevar el mensaje de Cristo al mayor número posible de personas con la tecnología digital

Graduado en Publicidad y Propaganda, posee una maestría en Administración por la Fundación Getulio Vargas (FGV), en Brasil, y por años actuó en el segmento de e-Health. Se dedicó al desarrollo de estrategias de evangelismo en Internet por más de diez años. Actualmente es el director de Marketing Digital de la Sede Sudamericana de la Iglesia Adventista.